Cuando en el mercado argentino los consumidores ya se estaban acostumbrando a los tapones sintéticos, en reemplazo de los de corcho natural, está avanzando un cambio trascendente. Este año, se espera que unas 130 millones de botellas utilicen tapones ecológicos, fabricados a partir de la caña de azúcar.
Así lo adelantó Andrés Belinsky, CEO de Vinventions Sudamérica, la compañía líder en sistemas de tapado a nivel mundial y propietaria de la marca Nomacorc.
Para este 2017, Vinventions proyecta comercializar un total de 270 millones de tapones en el país y elevar la proporción de su línea ecológica hasta un 50%, lo que daría como resultado un total de 135 millones de botellas de vino argentino que pasarían a incorporar estos sistemas de tapado, amigables con el medio ambiente.
La buena receptividad que está logrando con estos nuevos tapones -que utiliza la caña de azúcar como materia prima principal- llegó a tal punto que Vinventions apuesta a que en 2018 el 100% de los tapones comercializados en la Argentina sean de la línea ecológica.