Después de evadir un control de Gendarmería Nacional que estaba montado sobre la Ruta Nacional N° 9 en la localidad de Tres Cruces, un grupo de narcotraficantes fue perseguido por efectivos de la Policía de la Provincia entre los cerros puneños y aunque no pudieron darles alcance, en la persecución los criminales abandonaron la carga: 73 kilos de cocaína de máxima pureza, valuada en 22 millones de pesos.
"El objetivo está cumplido y es que esta droga que seguramente iba a ser ´estirada´, no llegó a las familias. Seguiremos trabajando junto con la Agencia de Delitos Complejos y al personal policial para luchar contra el narcotráfico y el narcomenudeo", dijo el ministro de Seguridad de la Provincia, Ekel Meyer.
Fuentes oficiales indicaron que el procedimiento fue producto de "tareas de inteligencia e investigación" y estuvo a cargo de miembros de la fuerza, del área Narcotráfico con asiento en la ciudad de Humahuaca.
De acuerdo al relato, los sospechosos evaden un control de Gendarmería Nacional montado sobre Ruta 9 y logran "huir hacia los cerros, por lo que los policías se dividieron en grupos y se ubicaron en sectores estratégicos, realizando una vigilancia discreta y a oscuras".
Así fue como una de las patrullas "logró dar con tres hombres, que al ser advertidos arrojaron tres bultos al suelo y de inmediato se dieron a la fuga, iniciándose una persecución" que lamentablemente resultó infructuosa por cuanto se activó "un rastrillaje por las quebradas y playas, sin lograr dar con los fugitivos".
Según se informó, los bultos abandonados por los "narcos" contenían 73 paquetes con forma de "ladrillos" y ante la presunción de que trataba de sustancias estupefacientes, el Juzgado interviniente dispuso que ante presencia de testigos se abra la carga para determinar el contenido.
El reporte final de la Agencia Provincial de Delitos Complejos y la Dirección de Narcotráfico de la Policía de Jujuy indica que se trataba de 73 "ladrillos" conteniendo una "sustancia compacta de color blanquecino, con fuerte olor penetrante", la que sometida a las pruebas químicas correspondientes dio "resultado positivo para clorhidrato de cocaína y/o pasta base".
Toda la carga presentó un peso total de 73 kilogramos, volumen que fue entregado a la Justicia federal, órbita en la que de aquí en más continuará la investigación, tal como señaló el jefe de la Policía provincial, Guillermo Corro, que también destacó la importante tarea de inteligencia llevada adelante por los efectivos de la fuerza a su cargo y que permitió incautar este cargamento, que en palabras del ministro Meyer es el de mayor envergadura en lo que va de su gestión.