El frecuente intercambio de mensajes entre amigos enclaustrados por la cuarentena y separados por unos 3.900 kilómetros -la distancia entre Guayaquil, en Ecuador, y San Salvador de Jujuy, en Argentina- devino en un relato periodístico de las alternativas que depara la evolución de la pandemia de Covid-19 en aquel país.
Así es como el comunicador guayaco Ricardo Espinel describió para Vía Jujuy la situación que se vive en su ciudad, poniendo especial atención en la "confusión" producto de "los datos que emite el Gobierno".
"El Gobierno ecuatoriano tuvo que salir a pedir disculpas a nivel internacional porque los medios en todo el mundo comenzaron a difundir estas terribles escenas". Se refería a las imágenes que hace unas semanas daban cuenta de cadáveres en las calles y un sistema de salud desbordado.
"No solo en las aceras había cuerpos sino dentro de las casas, donde había olores insoportables por la cantidad de días que estaban allí. No había suficientes féretros y algunas empresas de sepelio se negaban a ingresar a los domicilios. El sistema de salud colapsó completamente", relata Espinel.
En Ecuador la cuarentena fue declarada el 12 de marzo y dos días después se prohibió los vuelos internacionales y se ordenó el cierre de fronteras.
Como ejemplo de lo incierto de la información gubernamental, mencionó las dudas con respecto al "caso cero", que según reportes oficiales es una persona que llegó del exterior hacia Guayaquil. Sin embargo, la comunidad maneja otra información: "Se habla de una paciente que llegó cerca de Guayaquil, en una urbanización privada, gente de mucho dinero, y allí hubo una fiesta y fue un foco de infección grande", remarca.
Los medios internacionales reflejaron también la tensión política entre Gobierno y oposición, e incluso de fisuras en el propio Gobierno de Lenín Moreno. "Se habla de una puja interna entre el Presidente y el Vicepresidente (Otto Sonnenholzner). Hubo cambios de funcionarios en varias áreas, como Comunicación e Inteligencia. Esto fuera de la pugna que se mantiene con el expresidente Rafael Correa, que fue juzgado y sentenciado", agrega el periodista.
"También hubo conflictos entre la Alcaldesa de Guayaquil (Cynthia Viteri) y varios personeros del Gobierno central, pero más que un tema político, esto último es un tema de protección de la salud. Nuestra ciudad ha sido desolada, ha sido devastada y por momentos en Guayaquil nos hemos sentido abandonados", confiesa desde su condición de ciudadano.
El hecho de que el "caso cero" ingresara por Guayaquil, hizo que esa ciudad tuviera mayor número de infectados que la capital Quito y otras ciudades más chicas. Sin embargo, en los últimos días las provincias de Santa Helena (cercana a la Guayaca) y Manabí, presentaron un aumento en la cantidad de casos positivos de Covid-19.
Nativo de Guayaquil, Ricardo Espinel es director general de Escenario Rock, un conglomerado de medios online y productora de eventos; locutor del programa PlayRock, que se emite en radio Playfm; y creador de contenidos audio visuales y comunicador.
"El problema acá fue inevitable, porque mucha gente no respetó la cuarentena -se enoja-. Por ejemplo, yo salí un día lunes a comprar mercadería y me encontré con kilómetros de cola porque había circulado un audio falso donde se decía que no se iba a poder comprar nada por tres días, y eso provocó un caos", describe.
Cuando arreció la pandemia en suelo ecuatoriano, tampoco había suficientes test para realizar las pruebas, ya que no llegaban al país. "Ahora que ingresaron y se hicieron más test, aumentó el número de casos" registrados, acotó.
En opinión del entrevistado, los datos estadísticos que publica el Gobierno de su país son poco confiables: "Por ejemplo acá en la provincia de Guayas, se hablaba hasta el día de ayer un total de 15.365 casos y se informaba de 242 muertes", lo cual suena "sumamente irreal".
"Según los datos que se maneja a nivel provincial en Guayas, producto de los cruces entre el Ministerio de Gobierno, el Registro Civil y los camposantos (cementerios), el número de fallecidos es de 8.000, número que no coincide de ninguna manera con lo que informa el Gobierno central", advierte.
A nivel país la semana pasada se "hablaba de 24.258 casos , con 1.557 personas recuperadas y 871 muertes, datos absolutamente poco creíbles", lo que lleva a Espinel a afirmar que "hay muchas contradicciones en los informes oficiales, no solo en redes sociales, sino en las cadenas nacionales".
Acerca de cómo las autoridades encaran la administración de la cuarentena, explicó que se ha implementado un sistema llamado "semaforización", para calificar la situación sanitaria de cada provincia del Ecuador.
"Rojo es lo que tenemos acá hasta ahora, que se mantiene la cuarentena y los vehículos pueden salir una vez por semana, por ejemplo. Cuando se llega a 'amarillo' se da más libertad de desplazamiento, se permite que se trabaje con cincuenta por ciento de personas; y el 'verde' tiene mayores libertades según el cuadro. Pero cada municipio es quien decide, no es decisión del Gobierno nacional".
En ese sentido pone en relieve que "acá en Guayaquil, desde la Alcaldesa hasta la población se han opuesto a flexibilizar, porque no están dadas las condiciones", dice Espinel concluyendo su relato para Vía Jujuy desde Guayaquil, su ciudad, sita a 420 km de Quito, la capital.