A los varios frentes de batalla abiertos en las últimas semanas en Jujuy, este lunes otro nuevo asunto provocó fuego cruzado entre oficialismo y oposición: la Zona Franca de La Quiaca.
"Después de conocer la existencia de la notificación judicial que confirma la voluntad de desalojar a los pobladores de La Quiaca Florida (Vieja) de su territorio, desde la Municipalidad de La Quiaca expresamos nuestro rechazo a dicha pretensión que no sólo viola los derechos de la comunidad, sino que demuestra la insensibilidad y arbitrariedad de parte del ente gubernamental".
Así fijaba posición el intendente quiaqueño del Frente de Todos, Blas Gallardo, que al mismo tiempo sostuvo que "así como está planteado, y como ya lo expresamos más de una vez, el proyecto que el gobierno provincial denomina 'zona franca' es incompleto, impreciso y excluyente".
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Recogió el guante el secretario de Gobierno de la Provincia, Diego Rotela, quien dijo estar "sorprendido por la posición asumida por el Intendente", por cuanto tras participar de una reunión a comienzos del año en la que se le hizo "conocer el proyecto y se le brindó toda la información necesaria que decía no tener del intendente anterior", había manifestado "su pleno acompañamiento al proyecto que hoy cuestiona con pretextos".
De mantener su rechazo -apunta el funcionario provincial-, Gallardo "se opone a un proyecto orientado a estimular inversiones, crear empleo genuino en la ciudad fronteriza y propiciar un impacto único en toda la Puna jujeña".
En la discusión intervino la diputada nacional Carolina Moisés, quien apoyando a su compañero partidario advirtió que el proyecto gubernamental "no cuenta con el apoyo de las autoridades municipales ni de las comunidades originarias de la región" y denunció que "el apuro oficial" por avanzar con la instalación de la Zona Franca "revela otra intención: priorizar la voracidad de empresarios ávidos por concretar negocios en abierta connivencia con el gobierno provincial y algunos de sus funcionarios, que descaradamente atienden a los dos lados del mostrador".
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Avisó asimismo la legisladora justicialista que "de ninguna avalaremos que la pretendida expropiación sea concretada sin respetarse el justo valor de las tierras en cuestión, muy alejado de los absurdos montos ofrecidos por el gobierno provincial".
"La zona franca es una realidad en marcha", dice por su lado Rotella, que entonces exhorta a Gallardo a "trabajar en conjunto en este proyecto, que no solo beneficiará a quienes se instalen en el predio, sino a los prestadores de servicios y por sobre todo los vecinos de la ciudad y la región, además de Bolivia por el costo diferenciado al cual podrán acceder para adquirir productos", detalló.
