A casi dos meses de iniciada la guerra entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás y tras cuatro días de tregua (este martes es uno de ellos), el Ejército de Israel y el movimiento islamista palestino Hamás se acusaron mutuamente de violar la tregua que rige en la Franja de Gaza, un día después de que ambas partes acordaran prorrogar el acuerdo durante dos días.
”Tres artefactos explosivos estallaron hoy en una hora cerca de los militares israelíes en dos sitios en el norte de la Franja de Gaza, lo que constituye una violación de la pausa” en la ofensiva, afirmó el Ejército israelí en su canal de la red de mensajería Telegram.
Según el comunicado, soldados fueron tiroteados en uno de esos lugares, por lo que abrieron fuego en respuesta, aunque estaban en las líneas del alto el fuego pactadas, informó la agencia de noticias Sputnik.
”Algunos militares israelíes sufrieron heridas leves durante esos incidentes”, aseguró la nota. Por otro lado, las Brigadas Ezzedin al Qasam, el brazo armado de Hamás, acusó al Ejército de Israel de “una clara violación” de la tregua en el norte del enclave, mientras que confirmó que había “fricciones” en la zona.
”Estamos comprometidos con la tregua siempre y cuando el enemigo se ciña a la misma. Pedimos a los mediadores que presionen a Israel para que respete los términos de la tregua, tanto por tierra como por aire”, dijo el comunicado de las brigadas.
La agencia de noticias palestina Maan reportó que carros de combate israelíes realizaron decenas de disparos en Ciudad de Gaza a primera hora del día, en el marco de un reposicionamiento de estos vehículos, sin que por ahora haya informaciones sobre víctimas.
La tregua entre Israel y Hamás comenzó el viernes pasado y las partes acordaron ayer extenderla hasta el miércoles próximo. El movimiento islamista palestino se dispuso a liberar a más rehenes para demorar la reanudación de la ofensiva israelí, y está previsto que realicen otros dos intercambios, uno cada día, de rehenes de Hamás en Gaza por palestinos presos en cárceles de Israel.
Sin embargo, Israel ha dicho repetidas veces que relanzará su ofensiva con “toda la fuerza” para desmantelar a Hamás una vez que expire este acuerdo, que también contempla que el Ejército israelí permita el ingreso de ayuda humanitaria para la población de Gaza.
Hamás y otros grupos armados de Gaza todavía retienen a unos 170 de los 240 rehenes, entre ellos una veintena de ciudadanos argentinos, capturados en sus ataques del 7 de octubre en el sur de Israel, que desataron la escalada y que, además, dejaron unos 1.200 muertos, en su mayoría civiles.
Del lado palestino, más de 14.800 personas, entre ellas más de 6.000 niños, murieron a causa de los bombardeos israelíes sobre Gaza.
Hamás liberó ayer a otras 11 mujeres y niños israelíes, incluyendo a seis rehenes de familias argentinas, en el cuarto y último intercambio previsto en el acuerdo inicial de alto el fuego, que entró en vigor el viernes de la semana pasada.
Israel, por su parte, liberó a 33 prisioneros palestinos. Hasta ahora, Hamás ya liberó a 50 rehenes israelíes en virtud del pacto, además de a otros 19 rehenes de otras nacionalidades a los que entregó por afuera del acuerdo. En el mismo lapso, Israel excarceló a 150 palestinos.
Hamás dijo que este martes liberará a otros 10 rehenes israelíes, y que Israel debería hacer lo propio con 30 presos palestinos. Israel ha dicho que ampliaría el alto el fuego un día por cada 10 rehenes adicionales liberados.