Un adolescente de 15 años mató a su familia luego de que esta le cortara el Wifi como castigo por no tener buenas calificaciones en el colegio. Santi, como lo llaman, convivió durante tres días con los cadáveres en su casa, ubicada en Elche, Alicante.
La noticia dejó conmocionada a toda España, sobre todo porque según informaron las fuentes policiales el joven se había mostrado totalmente “frío y sin arrepentimientos” por el crimen de sus padres y hermano, el cual tenía tan solo 10 años.
Los detalles son más espeluznantes, ya que el adolescente le disparó dos veces a la madre, dos al hermano y tres a su padre. Despues de matarlos, almacenó los cuerpos en un especie de bodega que hay en el hogar y fue en ese momento que le contó a una de sus tías lo que había sucedido.
Ante su ausencia en el colegio, Santi le dijo a sus compañeros que había dado positivo de coronavirus y que por ese motivo no asistiría a clases.
Ante el dramático hecho, el Ayuntamiento de Elche, ha decretado tres días de luto oficial con las banderas a media asta, después de permanecer varios minutos en silencio en honor a las víctimas.
Qué dijeron los amigos del menor
Uno de los compañeros dialogó con la prensa española y calificó al asesino como una persona “tímida”, pero que conversaba bastante si tenía confianza.
Además remarcó que era muy activo en redes sociales y adicto a los videojuegos. Según testigos cercanos, a su madre no le agradaban este tipo de juegos y que por ese motivo siempre discutían.
Otro de sus amigos agregó: “Santi era tímido y nunca lo habíamos visto enojado o discutiendo con alguien. No nos esperábamos algo así de él”.