Más de 30.000 personas tuvieron que huir de las llamas en la turística isla griega de Rodas, “la mayor operación de evacuación jamás realizada en Grecia”, azotada por una ola de calor.
Desde el inicio del verano, temperaturas extremas agobian a decenas de millones de personas en gran parte del hemisferio norte. Según previsiones de expertos, julio podría convertirse en el mes más caluroso jamás registrado en la historia.
En Grecia, donde los bomberos contabilizaron 46 nuevos incendios en 24 horas, las llamas seguían causando estragos el domingo, por sexto día consecutivo, en el este de Rodas, una isla de 100.000 habitantes muy popular entre los turistas británicos, alemanes y franceses.
El sábado, unas 30.000 personas tuvieron que abandonar sus viviendas y hoteles a causa del avance del incendio. Los turistas evacuados pasaron la noche en gimnasios, escuelas o centros de conferencias.
“Se trata de la mayor evacuación jamás realizada en Grecia (...) Todo salió bien. Todo el mundo, especialmente los turistas, acató lo que habíamos ordenado”, subrayó Konstantia Dimoglidou.
En total fueron evacuadas 12 localidades, incluida Lindos, uno de los principales destinos turísticos de la isla.
Las llamas alcanzaron la noche del sábado el pueblo de Laerma, devorando varias casas y una iglesia. Los incendios se propagaron hasta los pueblos costeros de Kiotari y Gennadi Lardos.
Los testimonios de la destrucción
Paul F., un alemán de 23 años, dijo al diario Bild que él y su amiga se salvaron in extremis. Tras despertarse de una siesta en la playa descubrieron que “la playa y la piscina (del hotel) estaban desiertas”. Corrieron a su habitación, empacaron sus pertenencias y fueron a la recepción, donde se distribuían toallas húmedas para protegerse del humo, para esperar la llegada de socorristas.
“Brasas revoloteaban sobre nuestras cabezas y no llegaba la ayuda. Tenía la sensación de que nos habían abandonado, hacía tanto calor y el humo ya era tan denso que no podríamos haber aguantado más de diez minutos”, explicó.
“Algunos, en pánico, intentaron de encontrar barcos para irse”, pero finalmente llegaron autobuses para evacuarlos. El ministerio de Relaciones Exteriores griego abrió una célula de crisis en Atenas para facilitar la repatriación de los extranjeros.
Por su parte, TUI, la compañía número uno mundial del turismo, y la compañía británica JeT2 anunciaron que suspendían sus vuelos hacia la isla. Los aviones viajarán eso sí vacíos a la isla para poder repatriar a los turistas.
El operador turístico neerlandés Corendon anunció una interrupción similar, según los medios locales.
Una ola de calor jamás registrada
Según las autoridades se necesitarán aún varios días para sofocar las llamas, atizadas por fuertes vientos.
Se prevé que los termómetros superen este domingo los 44 °C. “Según nuestros datos, probablemente viviremos una ola de calor de 16 a 17 días, algo que nunca ha ocurrido en nuestro país”, declaró el director de investigación del observatorio meteorológico nacional, Kostas Lagouvardos.
Todos los lugares arqueológicos en Grecia, incluida la célebre Acrópolis de Atenas, permanecerán cerrados al público durante las horas más calurosas del día.