La situación de la medicina en Argentina empieza a ser un tema de preocupación tanto para quienes se atienden en hospitales públicos como en ámbitos privados. La falta de pago a los profesionales empieza a generar bronca en un sector cada vez más complicado por la crisis económica.
En un comunicado en abril, el Sindicato de Médicos AMRA señaló que “a raíz de la difícil situación que vive nuestra nación, solicitamos con urgencia a las autoridades nacionales y provinciales una urgente recomposición salarial para todos los subsectores de la salud”.
La alarmante situación de los médicos se traslada también a las obras sociales y prepagas que tienen atrasados sus pagos a profesionales que atienden con este servicio como pueden ser psicólogos, psiquiatras, nutricionistas o dermatólogos.
En ese sentido, la Confederación Médica de la República Argentina (Comra) señalaron que cerca del 15% de profesionales de la salud renunciaron las cartillas de los prestadores debido a la fuerte crisis que atraviesa el sector.
Es decir, un psicólogo, nutricionista o psiquiatra, por ejemplo, no podrá ser abonado más con la prestación de la obra social que se paga todos los meses y se sumará un gasto adicional para una consulta, que pueden rondar entre los 4 y 7 mil pesos dependiendo el profesional.
En ese sentido, algunos profesionales señalaron a este medio que desde noviembre no se han pagado las prestaciones, haciendo que ese dinero que se debía cobrar actualmente haya perdido fuertemente su valor. Esto ha provocado que cada vez haya menos oferta en las gacetillas de las obras sociales y los profesionales se vuelquen en el ámbito particular.
La crisis en los hospitales: “La hora médica se paga menos que un kilo de milanesa”
Una de las cuestiones que han atravesado a todos los rubros es el fuerte impacto de la inflación en los sueldos y ahora también los médicos de hospitales tanto públicos como privados se han visto envueltos en esta dificultad. “Vemos con muchísima preocupación el crecimiento cada vez mayor de la precarización, sobre todo, en el subsector privado con empresas monopólicas de salud que se agrupan en cámaras provinciales y nacionales”, señalaron en un comunicado.
En diálogo con la prensa, el dirigente Jorge Corral había manifestado días atrás que la hora médica se paga “menos que un kilo de milanesa”, ya que según expresó, una de las prepagas más importantes como lo es Galeno, paga $1700 la hora en los sanatorios de La Trinidad del Gran Buenos Aires, con la que AMRA se encuentra en conflicto.
Desde el gremio plantearon que en base a los cálculos de la Canasta Profesional Médica, la hora de trabajo del profesional debe ser $4.323 de bolsillo. “Exigimos que se establezca un solo valor para la hora médica con actualizaciones permanente de acuerdo a los guarismos que marca el INDEC y que surja de un cálculo de tres canastas básicas y media”, agregaron.
Las obras sociales y prepagas en la mira por la demora en los pagos
El foco estuvo puesto sobre las prepagas y en las obras sociales por las demoras en el pago a profesionales que atienden a personas con discapacidad, algo que generó mucha angustia en las familias. Sin embargo, los reclamos iban que desde hacía 180 días que no le pagaban a los profesionales.
En ese sentido, esta situación está en el foco de todos los que se atienden por obra social con diferentes especialistas. El presidente del Círculo Médico, Gabriel Correa, señaló semanas atrás que “hay muchas obras sociales con demora”. “Nosotros manejamos 50 obras sociales, de esas 50, 15 están con un retraso que van más de 4 meses. Se hace muy difícil que el profesional médico siga atendiendo así” expresó.
“Lamentablemente si esto no se soluciona, los médicos van a tener que obligarse a cobrar un arancel diferenciado. No podemos soportar 6 meses de atraso en el pago, inclusive los valores de los pagos han quedado por atrás”, agregó.
Se trata de una medida que ya se ha empezado a ver en el rubro de psicólogos o psiquiatras donde muchos profesionales decidieron irse de las obras sociales por los atrasos en los pagos. Además, generando una caída en la oferta de terapeutas.
Cabe remarcar que esto no solo afecta a los médicos, sino también a las personas que destinan parte de su salario bruto al Sistema de Seguridad Social y que también, en caso de querer realizar una consulta con algún especialista particular, deben destinar fondos de su sueldo neto.