Luego de que en tres meses se desbarataran cuatro criaderos ilegales en casas y departamentos de Capital y Gran Buenos Aires, se reabrió el debate sobre la venta de animales en canales on-line. En total, fueron rescatados 311 perros chihuahuas, salchichas y bulldogs francés hacinados y pésimas condiciones.
Los ejemplares eran utilizados para la cría de cachorros y vendidos a precios altísimos en las redes sociales y en plataformas de comercio electrónico. Este contexto, motivó a abogados y activistas a impulsar iniciativas que logren detener la comercialización de animales de raza.
“Los criaderos clandestinos se multiplican por la demanda de gente que ve a las celebrities o influencers con perros de esas razas por las redes o publicidades. Las modas dirigen la oferta y eso fomenta la explotación animal”, argumenta Fernando Pieroni, quien junto a otros compañeros denunció a un establecimiento clandestino de Temperley, en donde rescataron 97 perros Dachshund, más conocidos como “salchichas”.
El sitio web más grande de comercio electrónico arroja cerca de 88 mil resultados si uno coloca “perros de raza” en su buscador. Para tener una idea de la magnitud de la oferta, el rubro celulares cuenta con alrededor de 45 mil publicaciones.
El negocio maneja cifras exorbitantes: los perros de razas bulldog francés, ovejero alemán y bulldog inglés, entre otros, cuestan entre 95.000 a 3.500.000 pesos. Se entiende así por qué prolifera la explotación de animales, considerando las ganancias que le generan tanto a los vendedores como las comisiones para los portales web por cada operación.
Por qué no es suficiente la ley actual
“Lo único que hay es la ley 14.346 de maltrato animal, ya desactualizada, que se utiliza como fundamento en los allanamientos. Hay vacíos legales a nivel nacional que permiten que cualquiera pueda criar y explotar perros en su casa para venderlos en plataformas digitales como Mercado Libre. Este sitio facilita la venta de mascotas a las que considera cosas y la responsabilidad penal se la extiende al vendedor”, explicó Alfredo Castillo, abogado especialista en derecho animal.
“De hecho, al momento de la publicación de cachorros, este sitio no solicita ningún tipo de documentación que certifique al usuario como criadero legal”, explicó. En esos casos, los usuarios deberían publicar el certificado del Kennel Club Argentino o la Federación Cinológica Argentina, únicos registros oficiales caninos del país.
Para el abogado, se deberían cambiar el código penal, civil y comercial para evitar la venta de canes y gatos en plataformas de comercio electrónico que los considera como “cosas” o mercancías.
“En nuestro país, la Ciudad de Buenos Aires es la única jurisdicción que no autoriza los criaderos y prohíbe la exhibición de animales en las vidrieras de las veterinarias y acuarios. En el resto del país, no hay reglamentaciones claras. De hecho, esta actividad es lícita en casi toda la Argentina. Al no haber legislación, el Estado no dice qué está reglamentado y qué no. Ningún criadero [fuera de CABA] fue desmantelado por ser una actividad ilegal, sino por la ley 14.346″, detalló Castillo.
Cuáles son los proyectos y pedidos vigentes
Una de la que se puso al frente de los reclamos fue la actriz y activista Liz Solari, quien lanzó un pedido en la plataforma change.org para que los legisladores aprueben un proyecto -que pretende modificar el Código Civil- que busca reconocer a los animales como “seres sintientes” y sujetos de derecho.
La iniciativa de Solari cuenta con más de 40 mil firmas y subraya que la “Argentina mantiene la condición jurídica de cosas al referirse a los animales (no humanos), negándoles ser sujetos de derechos y avalar su sintiencia, inteligencia y conciencia reconocida hoy en día por la ciencia”.
A su vez, el activista y fundador de la comunidad digi tal “Cascote, un perro macanudo”, Federico Sordo, impulsó una petición en change.org dirigida a Marcos Galperín, CEO de Mercado Libre. Esta ya cuenta con más de 213 mil firmas y consiste en conseguir la “prohibición de la comercialización de animales en estas plataformas” que, asegura Sordo, “son cómplices de la explotación”.
“En todo este tiempo de revolución informática, hemos descubierto lo que hay detrás de la cría y venta de animales, cómo las hembras son atadas en sillas de monta y sometidas a la violación con la ayuda de las manos de un humano”, dice el texto.
Cabe mencionar que se pueden realizar denuncias penales por maltrato animal. El trámite es gratuito y los funcionarios están obligados a tomarla. Según la zona en donde viva el denunciate se puede hacer:
- En la comisaría más cercana al lugar donde ocurrió el hecho.
- En la fiscalía o UFI (Unidad Funcional de Instrucción).
- En el Juzgado de instrucción.
