Se prevee un verano seco nuevamente y esto ocasionaría problemas de agua en varios municipios por la bajante de los ríos. Dada la experiencia de temporadas de sequías anteriores, desde el Instituto Misionero de Agua y Saneamiento trabajan en un plan de contingencia para la ciudad de Puerto Iguazú.
El río no está en un caudal óptimo, y por ello realiza obras de mejoramiento en la balsa para la extracción desde el río Iguazú. Se trata de un sistema por gravedad, y ahora hay que adaptarlo: "cuando el río sube, se trae la balsa hacia la costa y cuando baja, la llevás hacia el sector más profundo. Es la única solución si el río se retira", detalló Ulises Espinoza, director de Servicios del IMAS en Iguazú en entrevista con Primera Edición.
Según explicó el funcionario, la sequía del año pasado dejó los caños de la toma al aire libre por fuera del agua. Además, el IMAS cuenta con cinco pozos perforados en distintos barrios. Uno de los principales problemas que enfrentan en la ciudad son las conexiones clandestinas que hacen que la red colapse.