La noticia de la muerte del músico popular Carlos Sherer, a los 55 años, generó conmoción en la comunidad y en toda la familia Sherer. Quienes lo conocieron, lo describieron como un hombre de un enorme corazón, alegre, divertido, solidario, una persona querida y reconocida por su gente por su humor, energía y entusiasmo. Sherer era el alma de las fiestas del pueblo, animaba los encuentros familiares, cumpleaños, casamientos, fiestas provinciales, y todo evento que se organizara de importancia en Montecarlo.
Con un estilo propio desde hace décadas, el grupo musical "Los Hermanos Sherer" estaban presentes en los principales eventos del pueblo, y Carlos fue considerado como un fiel representante cultural de la música y el arte popular de su gente.
Toda la comunidad de la zona norte acompaña a su esposa Claudia Susana, y sus hijos, tres varones y una pequeña niña, en este difícil momento, como también a sus hermanos Florindo y Antonio y toda la familia.
Sobre el desenlace falta, su hijo mayor explicó que "estuvo internado unos días, y tenía la presión alta. Los médicos nos explicaron que son señales de que no estaba bien. Pero lo estabilizaron y le dieron el alta médica ayer (martes). Pero esta tarde (miércoles) cerca de las 18 horas se descompensó y le dio un infarto, no aguantó", relató aún conmocionado su hijo Alexis Sherer (23).