Según el informe, “La movilidad previsional: análisis de las actualizaciones jubilatorias de la nueva ley″, del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), en la primera medición del año la movilidad jubilatoria llego al 17,04%, levemente por debajo de la estimación de la inflación.
En 2021 se observa que la primera actualización significó un incremento de 8,07%, mientras que la inflación alcanzó 12,92%. No obstante, desde la segunda en adelante, el resultado se invirtió quedando por encima de la inflación. En 2022, la primera actualización sumó 12,28%, pero la inflación superó dicho guarismo y se ubicó en 16,07%.
La novena medición de la actualización jubilatoria derivada de la nueva ley de movilidad, alcanzó el 17,04%. La inflación estimada en el Relevamiento de Expectativas de Mercado del Banco Central (REM) de enero a marzo, se estima en 18,1% en el trimestre. En consecuencia, esta movilidad fue acompañada de un bono de $15.000 mensual decreciente hasta $5.000 en marzo, abril y mayo para aquellos que cobren menos de dos jubilaciones mínimas.
¿Qué es la movilidad jubilatoria?
La Ley de Movilidad, que está vigente, indica que los aumentos trimestrales para jubilados, pensionados y titulares de asignaciones de Anses se calculan en base a un coeficiente elaborado en partes iguales por la recaudación previsional y la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte).
La ley, asegura 4 aumentos trimestrales por año. La normativa alcanza a 18 millones de personas, entre ellos: jubilados, pensionados y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH), asignaciones familiares, pensiones no contributivas, y pensión al adulto mayor.
La fórmula, que rige desde 2021, tiene como antecedente directo lo establecida por la Ley N° 26.417, vigente desde 2008 hasta su derogación en 2017, y sus elementos constitutivos básicos, los salarios y la recaudación. No obstante, sale del cálculo de los aumentos la inflación.
Actualización jubilatoria 2021 y 2022
El informe detalla que desde la implementación de la ley, en 2021, se observa que la primera actualización trajo un incremento de 8,07%, mientras que la inflación alcanzó 12,92%, pero desde la segunda en adelante, el resultado se invirtió: 12,12% vs 10,98%, 12,39% vs 9,27% y 12,11% vs 10,12%. Es decir, tres de las primeras cuatro actualizaciones jubilatorias de 2021, resultantes de la fórmula votada a finales de 2020, lograron superar la inflación (junio, septiembre y diciembre 2021).
Para compensar el desfasaje de la primera actualización de movilidad, el Gobierno incluyó dos bonos de $1.500 pagaderos en abril y mayo de 2021 para jubilaciones de hasta $30.856. Para compensar el segundo trimestre, se pagó un bono de $5.000 en agosto. Finalmente, en diciembre de 2021, los jubilados percibieron hasta $8.000, cobrando no menos de $37.062.
En 2022, la primera actualización sumó 12,28%, pero la inflación superó dicho guarismo y se ubicó en 16,07%. En ninguno de los trimestres el aumento logro superar la inflación. Por esto, se decidió implementar un bono de $6.000 pagadores en abril. Luego de ello, y con el objetivo de equiparar el Refuerzo de Ingresos anunciados para desocupados/as, trabajadores/as de casas particulares, y demás, se decidió incorporar un segundo monto, pagaderos en mayo, de $12.000.
Para compensar la situación del tercer aumento anual, se impulsó un bono de $7.000 mensuales (que irá decreciendo progresivamente hasta $4.000 que cobrarán quienes tienen ingresos de hasta dos haberes mínimos). En diciembre, la actualización sumó 15,6% y quedó por debajo de la inflación, que sumó 17,2%. Por esta razón, en diciembre, enero y febrero se implementó un bono de $ 10.000 mensual.