Martín Guzmán afirmó este viernes que el Gobierno pretende resolver “este año” la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Asimismo, el ministro de Economía ratificó que avanza en el diálogo con el organismo con el aval del presidente, Alberto Fernández, y de la vicepresidenta, Cristina Kirchner.
Al ser consultado sobre si la crisis interna que tuvo la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, este año por países que querían sacarla del cargo, el funcionario respondió: “Obviamente que la geopolítica importa. En los últimos meses hubo una dinámica en la política internacional, disputas de poder que generaron dudas y ruidos y que afectaron a la figura de Georgieva cuando estuvo bajo ataque. Hoy la situación está más estable”.
Guzmán descartó que a esta altura haya diferentes visiones en el Frente de Todos sobre cómo y cuándo hay que cerrar la refinanciación de la deuda con el Fondo Monetario. “Todos estamos en la misma página. El endeudamiento con el Fondo es un problema muy grave para la Argentina y nosotros no estamos hoy en condiciones para hacer frente a los vencimientos tal como fueron programados”, aseguró.
“Hace falta un acuerdo, pero no cualquier acuerdo. Buscamos algo bien diferente a lo que firmó el Gobierno anterior, que fue extremadamente dañino para la Argentina. Que tenga como base nuestra visión de la política económica que es la que le está permitiendo a la Argentina recuperarse”, comentó en declaraciones a radio Con Vos.
Guzmán aseguró que tiene “diálogo fluido y muy valioso” con Cristina Kirchner y señaló que ella respalda las negociaciones que se están desarrollando con el Fondo.
“Todo el Frente gobernante está alineado en la visión sobre cómo se resuelve este problema. Y buscamos un acuerdo. Queremos resolverlo este año. Por supuesto que aquí no hay un solo lado, hay dos lados”, dijo.
Avances en las negociaciones
Guzmán dijo que a lo largo de las negociaciones con el FMI hubo un “marco conceptual bien diferente” al que es usual o estándar para un proceso de negociación entre el organismo y cualquier país del mundo.
En ese sentido, dijo que el FMI ha entendido que lo que en la Argentina ha detenido el crecimiento fue la restricción externa: la falta de dólares. Y, por lo tanto, “ese es el principal escollo a superar”, por lo que hay que lograr las condiciones macroeconómicas, un rol del Estado para la política productiva y una articulación de reglas de juego que favorezcan el desarrollo de los sectores exportadores.
“Lo que nosotros queremos es que el Estado pueda seguir impulsando el crecimiento de la demanda, de una forma que genere más capacidad productiva y generación de conocimiento y que haya un multiplicador más grande de la actividad, como por ejemplo la inversión en obras públicas”, dijo.
E indicó que la idea es implementar esa estrategia “mientras se van ordenando las cuentas públicas. Pero, como dijo el presidente, el superávit fiscal virtuoso siempre es hijo del crecimiento, no del ajuste”, expresó Guzmán. El funcionario negó en ese sentido que el FMI ya le haya expresado que no aceptará una baja gradual del déficit fiscal”.
Según Guzmán, el FMI está transitando una “transformación” en sus conceptos, lo que permitió avanzar en “muchos entendimientos” con el Gobierno de Fernández, lo cual está explícito –indicó- en cada uno de los comunicados que fue publicando en su propia página web tras las reuniones mantenidas.
Guzmán insistió con que “negociar no es obedecer” lo que puede pretender o no el FMI. Y expresó que por ello es imposible cerrar un acuerdo “en cinco minutos”, como había dicho el expresidente Mauricio Macri que hubiera hecho en caso de haber continuado en el Poder más allá de 2019.