El juez federal de Corrientes Carlos Soto Dávila aseguró este lunes que probará su inocencia en la causa en la que se lo acusa de haber recibido coimas para garantizar la impunidad de narcotraficantes de la ciudad de Itatí y dijo que la acusación en su contra es "una falsa denuncia" por parte de "los fiscales" federales correntinos.
El magistrado imputado prestó declaración indagatoria en los tribunales federales de Comodoro Py ante su colega Sergio Torres, donde presentó un escrito y se retiró sin formular declaraciones a la prensa.
"Jamás en mi larga trayectoria como juez exigí ni hice exigir un solo peso ni prebenda alguna de ningún imputado sometido a mi juzgamiento, y lo único que percibí siempre por mi tarea fue mi sueldo, y así lo demuestra la vida que llevo", afirmó Soto Dávila en el escrito que presentó como defensa.
El juez correntino realizó una exposición verbal "formal", según describieron fuentes judiciales, y añadió a su descargo un texto de 50 páginas, al que accedió Télam, con el que respondió a cada una de las acusaciones que pesan en su contra.
Soto Dávila está acusado de ser el jefe u organizador o cabeza de una asociación ilícita tendiente a proteger delincuentes a cambio de dinero, en supuesta connivencia con sus secretarios -dos de ellos detenidos- y demás miembros de fuerzas del estado.
En su descargo por escrito, lo primero que hizo el juez federal de Corrientes fue intentar desmentir las acusaciones en su contra a través de la solicitud de ser sometido a una "verificación patrimonial".
"Mi casa donde vivo la compré antes de ser Juez, mi auto es un Volkswagen Vento del año 2015 y mi mujer (ya jubilada de sus labores en el banco de la provincia de Corrientes) tiene un Suzuki Swift del año 2008. También un terreno en Paso de la Patria que recibí antes de entrar a la justicia y durante el ejercicio de mi profesión", sostuvo en el escrito que presentó junto con su abogado Gonzalo Díaz Cantón.
"Mi único lujo que escapa a estos bienes que estoy enumerando, son dos bicicletas ya que es mi pasatiempo y mi deporte mediante el cual me manejo por la ciudad donde vivo y donde todos me conocen", aseguró el juez imputado.
Soto Dávila sostuvo, además, que por no ser funcional a los narcotraficantes hay quienes quieren quedarse con su sillón de juez e incluso sugirió que puede haber "algún político que quiere poner a su alfil" en ese cargo.
"Créame que le están mintiendo estos falsos 'arrepentidos' Señor Juez, de los que desconozco sus identidades pero no tenga duda que algún interés creado tienen para tratar de involucrarme en esta basura de la que estoy siendo víctima", sostuvo.