El último partido de la fecha, fue el del año. Belgrano y Boca se atacaron a fondo con siete goles, de los cuales seis fueron en los primeros 45 minutos. Triunfazo del Pirata puntero. A Talleres se le cortó la racha con River, e Instituto se quedó con el alarido de triunfo inconcluso ante el Lobo.
Belgrano, invicto y ya salvado del descenso cotiza en otros objetivos, como entrar a la Copa Sudamericana. Con las pulsaciones a mil, como el dólar, le ganó un partido para el recuerdo a Boca.
EL BELGRANO-BOCA, UN PARTIDO DE PREMIER LEAGUE
¿Un encuentro con tantos errores defensivos puede catalogarse partidazo? A la multitud en el Gigante poco le importo por la vibración de 45 minutos electrizantes. “De Premier League”, como lo comparó el Luifa Artime.
Belgrano, más allá de que también se equivocó defensivamente, mostró recursos ofensivos con su nuevo goleador Lucas Passerini, artillero de la Copa de la Liga con seis al igual que Luciano Gondou (Argentinos). Y tuvo la suerte, y el travesaño, a su favor en lo que podría haber sido el doblete del Pipa Benedetto y el 3-1 de Boca.
Lo dio vuelta el Celeste, aplicando la ley del ex que no falla, ni aunque se trate de un volante de equilibrio como Esteban Rolón (se fajó toda la noche con sus ex compañeros). Y lo terminó ganando por su intendente del gol que sigue cumpliendo con sus promesas, y un Ulises Sánchez candidato a ser el asistidor del año (con cuatro, es que más hizo en el sorteo).
En los 100 partidos de Guillermo Farré como entrenador, curiosamente se cortó la racha sin victorias sobre en Córdoba. La última había sido en 2012 por 3-1; tercer gol convertido por el Farré volante.
Párrafo aparte para este Boca internacional que en el torneo local no despega. Empezando por un Javi García que ni pinta de arquero tiene. Salvo el Colo Barco, de Premier, y los dos delanteros, el resto es a la inversa de lo que tiró Javier Milei (nafta al fuego): no deberían sacarlos del banco.
TALLERES, DE RIVER A BOCA
Un Talleres que era la bestia negra de River, con cuatro triunfos consecutivos, se volvió con las manos vacías del Monumental. Perdió 1 a 0 por un acierto, más bien por un error de los que no suele cometer Guido Herrera.
Del mal trago de la Copa de la Liga (por ahora fuera de la zona de clasificación), a saborear una posible clasificación a semifinales de Copa Argentina este domingo en Mendoza contra Boca, otra vez en su camino. Sin sus seleccionados y con un rendimiento llamativamente por debajo de lo que fue el primer semestre, la T va por la madre en el Día de la Madre. Si Talleres pierde, el índice de inflación será muy alto.
INSTITUTO GANABA POR CUELLO, Y SE LE FUE DE LAS MANOS
Cuando parecía que lo ganaba Instituto y prácticamente aseguraba su permanencia en Primera, un Gimnasia que la pelea muy de atrás y que más que Lobo es gatito mimoso, se lo empató 1 a 1 al final. De todos modos, la Gloria sigue a un paso de salvarse en la tabla de los promedios, ya que una derrota más de Arsenal, que visitará a Talleres, lo condena a la B.
El equipo de Diego Dabove no está como para pasear en yate, y menos al estilo Insaurralde, pero navega rumbo a la salvación. De todos modos no puede regalar más puntos, para no meterse en la “boca del Lobo”.