A raíz del creciente número de turistas que llegan al lugar y la problemática del acampe ilegal, se abrió un polémico debate alrededor de un reconocido destino turístico. Enclavado en el corazón de Cuesta Blanco, se trata de un rincón a la vera del río San Antonio, que forma parte de una reserva natural.
A los vecinos comprometidos con el medioambiente les preocupa el impacto del turismo sobre la reserva. En este sentido, argumentan que la zona debería conservarse sin modificaciones en el suelo ni en el entorno.
BUSCAN RESTRINGIR EL ACCESO A UN PARADISÍACO RINCÓN DE CÓRDOBA
La Playa de los Hippies, cuyo nombre original es Playa de los Sauces, atrae a visitantes de diversas provincias por su belleza natural. El acceso a la playa se puede realizar a través de un sendero que cruza el monte o mediante canoas desde la zona conocida como “el diquecito”.
La demanda turística impulsó la creación de una cooperativa de trabajo, Paseos en Canoa, que ofrece traslados por un costo de 8.000 pesos. Si bien esta iniciativa genera empleo local, también incrementa la presión sobre el ecosistema de la zona.
Agustín Jagger, uno de los guarda-ambientes de la comuna, señaló la falta de protección del lugar permitió que se hagan actividades que afectan el ecosistema, como el acampe ilegal, que está prohibido. En temporada alta, se puede observar hasta 30 carpas en la playa y algunos, incluso, se han instalado de forma permanente en el lugar.
La presidenta comunal, Ana Gaitán, solicitó al gobierno provincial apoyo para regular la llegada de turistas con el objetivo de que siga siendo un lugar para pasear y disfrutar, pero sin que se convierta en un espacio para acampar y vivir permanentemente, lo que afecta la sustentabilidad del lugar.