Maira Tamara Barreto es la policía de Córdoba que asesinó a su hijo de un disparo, hirió a su otra hija e intentó suicidarse. Su expareja dijo que la mujer tenía antecedentes psicológicos. Sin embargo, desde la Jefatura de Policía manifestaron que “estaba en condiciones de portar armas”.
Aún no se sabe qué fue lo que pasó en esa vivienda de calle La Pampa al 600, de barrio observatorio, cuando Barreto atacó a sus hijos. Efectivos de la Policía y su expareja estaban en la puerta de su casa pero nada pudieron hacer para evitar el descenlace.
Tras el crimen, la Jefatura de Policía aseguró que la agente policial estaba en servicio, que había trabajado el día anterior y que no tenía antecedentes psicológicos ni denuncias previas. Sin embargo, este lunes, la expareja de la mujer aseguró que “había estado internada en el Instituto Morra”.
La Jefatura de Policía de Córdoba ratificó que Barreto estaba en condiciones de portar armas
El Comisario Mayor Gabriel Bosques habló con El Show del Lagarto y negó que la mujer policía haya tenido antecedentes psicológicos. Además puntualizó que “estaba en condiciones de portar arma”.
“En su declaración jurada, ella manifestó que no tenía antecedentes psicológicos. De los cuatro años de carrera policial, este año tuvo una neumonía con licencia médica y se hizo un resguardo del armamento. En octubre, se hizo un estudio psicológico y se decidió devolverle el arma”, precisó Bosques.
El Comisario Mayor explicó que Barreto tuvo Covid-19 en marzo por lo que comenzó una carpeta médica. En el mes de abril, se retiró su armamento, como lo dice el reglamento policial. A fines de julio, retomó la actividad pero en tareas no operativas hasta que se restablezca su salud.
“Cuando ya estuvo en condiciones, se dio el alta operativa y se procedió a una entrevista psicológica. Siempre se hace la valoración, para devolver a los efectivos a las calles. En octubre, le devolvieron su arma”, manifestó Bosques.
Sin antecedentes ni denuncias previas
Bosques volvió a ratificar que la agente no tenía antecedentes que los hicieran alertar por una situación como la que ocurrió el pasado domingo. “No tenemos nada a qué atribuirlo ni cuál fue el motivo que desencadenó esto”, dijo.
Además, aclaró que en las entrevistas pscicológicas se tratan no sólo temas relacionados a la función policial sino también cuestiones personales. “Desde la entrevista, no surgió nada que se haya podido detectar esto”, sentenció.