Este sábado 5 y el domingo 6 de junio se volverá al cierre estricto en Córdoba, algo que ya había sido anunciado por el Gobierno Nacional, y a raíz del avance de casos de coronavirus. “Hay más internaciones que altas”, justificó Diego Cardozo, ministro de Salud de la Provincia.
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Cardozo explicó tras el informe epidemiológico semanal que los indicadores de Córdoba no son favorables, con una tasa de incidencia de casos en aumento y una cantidad de contagios cada vez más alta que puso a los hospitales al borde del colapso y a la ocupación de camas críticas por encima del 70%.
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La Provincia, que había anunciado que no se iba a plegar al nuevo confinamiento, da marcha atrás y adhiere al DNU nacional que ya había sido informado por el presidente Alberto Fernández, cuando comunicó los 9 días seguidos de confinamiento estricto.
Es así que este sábado y domingo la actividad estará restringida de la misma manera que la semana pasada: salidas únicamente para el abastecimiento de 6 a 18 y circulación sólo para trabajadores esenciales.
Camas críticas
Diego Cardozo anunció además que cuando Córdoba llegue al 80% de ocupación de camas críticas, aumentarán las restricciones. Este lunes la cifra se acercó al 73 por ciento con más de 2.400 personas internadas, y viene creciendo en torno a un 2% diario.
“Queremos generar confianza en la gente. Si le decimos que vamos a parar por nueve días, serán nueve días; no 15 o 20 días. Pero necesitamos parar la curva exponencial de casos con una construcción colectiva”, declaró el Ministro. Y añadió que Córdoba tiene 35 mil casos activos en todo el territorio. Durante el pico de casos de octubre, esa cifra llegó como máximo a 21 mil.
