El pasado 23 de noviembre, una discusión familiar terminó con una mujer baleada en su rostro. El hecho ocurrió en barrio Comercial, cuando su hijo y su hermano peleaban. El primero sacó un arma y disparó. La bala impactó en el rostro de su mamá (42) quien continúa internada pero ya recuperó la conciencia.
Según testimonios de los vecinos, Lucas Ezequiel Gigena discutía con su tío, Sebastián Molina (36). En ese marco, la madre del joven se acercó para separarlos y recibió por error el impacto de bala en su ojo izquierdo.
En primera instancia, una hija de la mujer la trasladó al Hospital Príncipe de Asturias y recibió asistencia respiratoria mecánica. Pero como el cuadro era complejo, fue derivada al Hospital San Roque.
El estado de salud de la mujer baleada en el rostro por su hijo
Beatriz Molina (42), la víctima del hecho, continúa internada con pronóstico reservado, aunque en los últimos días tuvo visibles signos de mejora. Aún así, la bala continúa alojada en el cerebro, en la zona temporal izquierda.
Según informó Gabriela Nis, directora del Hospital San Roque, a La Voz la mujer se encuentra internada en la unidad de terapia intensiva y presenta una hemiplejía en el lado derecho del cuerpo. Actualmente, está sedada y con asistencia respiratoria mecánica, lo que le impide declarar en la causa.
En los últimos días, la mujer recuperó la conciencia momentáneamente ya que los médicos le retiraron los sedantes para analizar su respuesta neurológica. De esta manera, estiman que, si no hay recaídas, la paciente pueda ser intervenida quirúrgicamente.
Por el momento, los equipos de neurocirugía que la revisaron no recomiendan ninguna operación para extraer la bala. Su pronóstico sigue siendo reservado.
El hijo de la víctima está preso e imputado de homicidio en grado de tentativa
El caso está en manos del fiscal de instrucción especializado en violencia familiar y de género, Pablo Cuenca Tagle. El magistrado confirmó que el hijo de la víctima continúa detenido y que se encuentra imputado de lesiones graves calificadas.
Sin embargo, la carátula de la causa está sujeta a la evolución del estado de salud de su madre, y al resultado de la prueba que se continúa incorporando a la causa. Fuentes cercanas a la investigación deslizaron que la instrucción de la causa se encuentra casi concluida, la carátula cambiaría a homicidio calificado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa, en concurso con lesiones graves culposas, siempre que la madre sobreviva a las consecuencias del disparo.
Lucas Ezequiel Gigena, quien ya tenía antecedentes penales, declarará el próximo lunes en compañía de su abogado defensor que provisto por el Estado. Mientras tanto, se recaban pruebas fundamentales para esclarecer el hecho.
El relato de los vecinos de barrio Comercial
“Ella le gritó por el padre, se acercó y él disparó a la deriva pero le dio a la madre”, contó una vecina, posterior al hecho, en diálogo con El Doce. Al ser consultada por cómo es el sector, aseveró que la cuadra donde ocurrió el hecho es muy tranquila.