Algo más de un año después, desde Tamse tomaron la decisión de despedir a tres delegados de la empresa que estuvieron involucrados en el extenso paro que se llevó a cabo en el transporte urbano de pasajeros durante julio de 2017.
Los empleados echados son Sonia Beas, Erika Oliva y Luis Almada. Es por no haber acatado la conciliación obligatoria dictada durante los 10 días que no se prestó el servicio.
La información fue confirmada por el presidente de Tamse, José Fernández. "Esta mañana (por lunes), a través de un acta notarial con escribano público, notificamos a los ex delegados", declaró a Cadena 3.
