La comida elegida y la frecuencia con la que se la ingiere afectan a todo el cuerpo. Una mala alimentación traerá también como consecuencia una mala salud bucal. Según un estudio reciente, el 70% de los niños tiene caries y mantener los dientes sanos dependerá de varios factores, pero la alimentación podría ser una de las causas.
A la hora de saciar el hambre de los chicos o concederles pequeños gustos, las golosinas y las gaseosas azucaradas suelen ser grandes aliadas, pero a su vez, éstos pueden afectar el crecimiento de los dientes definitivos y ser los responsables de algunos problemas en su boca, como por ejemplo la aparición de caries. Esta patología ocurre cuando las bacterias entran en contacto con el azúcar que se ingiere y causan ácidos que atacan los dientes durante 20 minutos o más.
No es necesario eliminar completamente de la dieta las comidas altas en azúcar, pero si considerarlos una amenaza y controlar las cantidades que ingieren reemplazándolos por alimentos bajos en azúcar.
Asimismo, es fundamental que los niños mantengan una dieta equilibrada e ingieran una gran variedad de alimentos de los cinco grupos: hortalizas, frutas y semillas; cereales y legumbres; lácteos y derivados; carnes, pescado y huevo; aceites, grasas y azúcares.
Sin embargo, su salud bucal no se verá afectada únicamente por lo que comen sino también por el momento en que lo hacen. Los alimentos ingeridos durante una comida principal (desayuno, comida y cena) son menos nocivos dado que en esa ocasión se libera más saliva, que ayuda a masticar y a pasar los alimentos de la boca al sistema digestivo.
Además, la saliva tiene un rol crítico a la hora de contrarrestar los efectos de los ácidos sobre los dientes. Es en este sentido que resulta extremadamente importante que los chicos sigan una dieta equilibrada y no picoteen entre las comidas.
Alimentos que pueden beneficiar la salud bucodental de los chicos
El queso, la leche, el yogurt, las verduras de hojas verdes y las almendras son alimentos que sin dudas benefician la salud dental gracias al gran aporte de calcio y otros nutrientes.
Otros alimentos que benefician la salud bucal son aquellos ricos en proteínas, como la carne, el pescado y los huevos, son las mejores fuentes de fósforo. Ambos minerales desempeñan un papel determinante, ya que protegen y reconstruyen el esmalte dental.
Por otro lado, las frutas y verduras son una buena opción para una sonrisa saludable, ya que generalmente tienen un alto contenido de agua y fibra que equilibran los azúcares que contienen y ayudan a limpiar los dientes.
Además, ayudan a estimular la producción de saliva, que elimina los ácidos de la comida y las partículas de alimentos como también contribuye a neutralizar el ácido, protegiendo los dientes de la caries.
Asimismo, muchas frutas y verduras contienen vitamina C (importante para unas encías sanas y reparación rápida de las heridas) y vitamina A (otro nutriente clave en la construcción del esmalte dental).
La alimentación es un pilar esencial tanto en la salud general como en el cuidado de la boca, es por eso que es fundamental cuidar que comen los más pequeños y ser conscientes que su dieta puede tener diversos efectos en su bienestar.