Por Laura Giubergia.
En provincia de Buenos Aires y en Capital Federal, las Paso tuvieron una fuerte impronta femenina: Cristina Fernández, Elisa Carrió, Graciela Ocaña y Fernanda Vallejo encabezaron las boletas que más poder disputaron.
En provincia de Buenos Aires, la pugna por las bancas en Diputados estuvo ceñida entre Ocaña (Cambiemos Buenos Aires) y Vallejos (Unidad Ciudadana). Ambas fueron las que mayor caudal de votos juntaron, y el escrutinio provisorio cerró con apenas 2 puntos de diferencia entre ellas: 34,58 y 32,37 por ciento, a favor de Cambiemos.
Cristina Fernández, como candidata a Senadora de Unidad Ciudadana, obtuvo un 34,11 por ciento de los votos según el conteo temporal, apenas 0,08 por ciento menos que Esteban Bullrich, el candidato de Cambiemos que encabezaba la lista oficialista. Un “empate técnico” que precisa del recuento final para dirimirse.
En Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el triunfo de Elisa Carrió fue aplastante. La candidata de Vamos Juntos (Cambiemos) juntó el 49,5 por ciento de los votos, y le sacó 28 puntos de ventaja a las suma de las tres listas kirchneristas.
En Córdoba, en cambio, sólo dos listas de la izquierda estuvieron encabezadas por mujeres. Liliana Olivero lideró la del Frente de Izquierda y de los Trabajadores, y Luciana Echevarría la de Izquierda al Frente por el Socialismo.
Representatividad. "El gran triunfo de esta elección es la consolidación de la mujer en el espacio político, porque mientras que en 2015 costó muchísimo que se cumpla con la representatividad mínima del 30 por ciento, este año no hubo listas que no respetaran ese cupo", analizó para Día a Día Florencia Freijo, politóloga y militante feminista.
"Sin lugar a dudas se ha logrado consolidar la representatividad femenina, aunque esto no garantice en sí mismo que la política pública vaya a estar orientada hacia los reclamos que forman parte de las agenda feminista", explicó. Y puso como ejemplo que, pese a haber tenido recientemente a Cristina Fernández como presidenta, su mandato no significó un avance en materia de legalización del aborto.
"Fue muy evidente la posición de Cristina contraria al aborto, y tampoco es menor que el primer reclamo de Ni Una Menos ocurrió durante su mandato", apuntó.
Los valores. Como contrapartida a la importante representatividad femenina, se encuentran los posicionamientos de las mujeres que ocupan esos espacios. "No es un dato menor que las mujeres que más votos tuvieron no representan el reclamo de los movimientos de mujeres, e incluso se han manifestado abiertamente en contra", destacó Freijo.
Y describió: “Pensemos que este Gobierno tiene su fuerza en (María Eugenia) Vidal –clave en el voto a Esteban Bullrich–, Ocaña y Carrió, que representan lo contrario al movimiento de mujeres. Carrió siempre se ha manifestado contraria al aborto y muy cercana a la Iglesia”.
“En general, muchos de los reclamos feministas dividen el voto, y los políticos tratan de mostrarse neutros para que no les reste”, subrayó, y marcó la diferencia con las candidatas de los partidos de izquierda que forman parte del movimiento de mujeres, y embanderan esos pedidos.