"La criatura fue torturada durante todos sus 15 meses", dijo una de las peritos durante el juicioen la Cámara 11ª del Crimen de la ciudad de Córdoba.
Se refería a Bruno Bautista Villarreal, un bebé de 15 meses que murió en abril de 2018 a causa de múltiples golpes y heridas.
Los médicos del Hospital de Niños constataron las lesiones y radicaron la denuncia.
Este lunes, la madre y el padrastro de Brunito, Oscar Eduardo Peñaloza y Carla Andrea Villareal, fueron sentenciados a la pena de prisión perpetua por homicidio calificado por el vínculo.
En el juicio, los tres peritos consultados coincidieron en que las lesiones que sufrió el bebé, entre fracturas, heridas y hematomas, no se produjeron por accidente y fueron prolongadas en el tiempo.
De acuerdo con declaraciones de los vecinos de Villa Adela, el niño mantenía el llanto durante días y en la casa se ponía música a todo volumen cuando esto sucedía.
