A pocas horas de los festejos de fin de año, dos municipios catamarqueños se sumaron a la movida para evitar el ruido producido por pirotecnia estruendosa en las fiestas.
Se trata de Santa María y Andalgalá donde se sancionaron ordenanzas para prohibir el uso, distribución y comercialización de artículos de pirotecnia sonora.
“Declarase a la ciudad de Santa María libre de pirotecnia sonora”, citó l ordenanza en la localidad belinche.
Por su parte, la Municipalidad de Andalgalá a través de la dirección de Seguridad Ciudadana, informó que está en vigencia la ordenanza 09/19 de Uso, distribución y comercialización de artículos de pirotecnia sonora en toda la jurisdicción.
