La buena noticia para Nataly llegó este mismo miércoles por la tarde, cuando un técnico en telefonía celular que trabaja en un local ubicado en pleno centro de Carlos Paz, se ofreció de manera desinteresada a ayudar a Nataly, una mamá desesperada que extravió su celular con fotos, videos, y audios de su pequeño hijo Thiago, quien falleció con tan sólo 5 años en un trágico accidente en el río San Antonio en julio de 2019.
Lo cierto es que al perder todos esos recuerdos de inmenso valor, Nataly acudió a las redes sociales para exponer su situación y hasta llegar a ofrecer 5 mil pesos que con las horas pasaron a ser 10 mil, pero siempre apelando a la buena voluntad de aquella persona que encontró su teléfono celular "Motorola G7 Power" en una tapia al fondo de la calle Torricelli el último martes al mediodía, luego de que otro de su pequeño hijo, lo dejara por error en ese lugar.
"Quiero avisarles que un chico que trabaja en la casa de Claro me pudo recuperar las fotos y videos, ¡estoy feliz! Mi angustia ya se fue, yo dije 'lo único que quiero es recuperar las fotos y videos de mi hijo. No sé si podré recuperar los audios", comenzó diciendo Nataly Herrera en una publicación en su cuenta de Facebook este mismo miércoles por la tarde, a horas que su historia se difundiera en los medios locales.
"Gracias a todos los que compartieron. Gracias a todos los mensajes que me mandaron ofreciendo ayuda, hasta me ofrecieron celulares, pero no gracias. Pude recuperar las fotos, videos, todo gracias al chico que me ayudó, que no sé el nombre y no me cobró nada. Lo hizo de corazón, le ofrecí plata y no me la recibió", completó Nataly, quien se encuentra conmovida y aliviada ante una situación triste e inesperada.
Con respecto al celular, el aparato aún no aparece, a lo que esta joven madre insiste en recompensar a quien lo encuentre y se lo devuelva. Sin embargo, insiste en decir que se siente más que feliz por lo rápido que recuperó esos recuerdos tan valiosos, únicos, e irrepetibles para ella y toda su familia.
Foto de portada: gentileza Nataly Herrera.
