Algunos locales de la reconocida zona comercial del barrio porteño de Flores cerraron momentáneamente sus puertas este martes ante una serie de rumores que circularon por las redes sociales para advertir sobre la posibilidad de saqueos.
La Policía de la Ciudad acudió al lugar, sobre la Avenida Avellaneda, tras recibir una serie de llamados que advertían por “posibles ilícitos”. “Al ver los movimientos del personal policial, los comerciantes bajaron las persianas, pero luego de unos minutos, volvieron a abrir sus negocios”, afirmaron las fuentes oficiales consultadas por Vía País.
De esta manera, se confirmó que no hubo intentos de saqueos en el lugar, aunque los comerciantes vivieron momentos de preocupación atentos a los episodios de violencia que sí se registraron en en provincias como Córdoba, Mendoza y Neuquén.