Con el fin de disminuir los ruidos molestos y las personas heridas por su utlización indebida, en la ciudad de Buenos Aires buscan prohibir la pirotecnia más ruidosa.
"La restricción a la libertad de hacer ruidos con pirotecnia está más que justificada cuando sabemos el dolor que causa en muchas familias", dijo Hernán Reyes, legislador de Vamos Juntos, en diálogo con Clarín respecto a la presentación que realizó días atrás en la Legislatura porteña.
En ese sentido, Reyes explicó también que su iniciativa busca que se dejen de comercializar cohetes que afecten negativamente tanto a personas con el trastorno del espectro autista (TEA), como a las mascotas. Por esa razón, se impone un tope de decibeles de 70, que es el equivalente actual a lo que se consideran ruidos molestos en áreas levemente ruidosas.
"Debemos cuidarnos unos a otros como comunidad, hay chicos y abuelos que sufren mucho , nuestras mascotas también padecen los estruendos. Creo que es bueno que podamos debatir hasta donde nos autolimitamos en pos del cuidado del otros", agregó.
El proyecto en cuestión propone habilitar la venta de pirotecnia que no supere el límite sonoro solo con autorización, para lo cual deberá completarse un formulario que tendrá las características de una declaración jurada. Aquellos que utilicen fuegos artificiales sin ese permiso podrían recibir sanciones por parte de la autoridad de aplicación de la ley.
Hasta el momento, Tierra del Fuego, Neuquén y Mendoza son tres provincias del país que prohibieron la venta y el uso de pirotecnia sonora. Y otras ciudades también lo hicieron: Pinamar, Santa Fe, Bariloche, Bahía Blanca, Bolívar y San Martín de los Andes, entre otras.
Si se avanzara con esta ley, cualquier vecino que escuche pirotecnia podría hacer la correspondiente denuncia como ruidos molestos, situación que ya está prevista por el régimen de faltas para los locales comerciales y/o por el código contravencional.
Por su parte Guido Lorenzino, defensor del Pueblo bonaerense, apoyó la postura de Reyes y pidió este miércoles que se promueva una ley provincial para "prohibir definitivamente" el uso de pirotecnia en las fiestas de fin de año en ese distrito, medida que ya adoptaron 35 municipios.
"Vemos que hay un fuerte rechazo de la gente, pero las normas no acompañan ese reclamo. De todas formas hay un avance en ese sentido, ya que cada vez más municipios se suman a la prohibición conscientes del severo daño que produce el uso de pirotecnia", expresó Lorenzino.
"Es necesario que la Provincia promueva una ley para prohibir definitivamente esa práctica en el territorio bonaerense, que se ponga del lado de las personas, en especial de las que sufren alguna discapacidad, quienes junto a los animales domésticos son los que más sufren por los estruendos", insistió Lorenzino.
Los 35 municipios que ya prohibieron la pirotecnia son Ayacucho, Azul, Vicente López, Hurlingham, Necochea, Salto, Guaminí, Mercedes, Adolfo Alsina, Baradero, González Chávez, Daireaux, General Pinto, Coronel Suárez, Lincoln, Bahía Blanca, Lezama, Castelli, Chascomús, Zárate, Partido de la Costa, Florencio Varela, Avellaneda, Berazategui, Berisso, Junín, Coronel Rosales, Coronel Pringles, Bragado, Salliqueló, Rivadavia, San Pedro, Ramallo, Olavarría y Chivilcoy.