Ocho altos jefes de la Policía de la Ciudad fueron separados de sus cargos y sometidos a una investigación administrativa y eventual denuncia judicial, por una presunta estafa relacionada al cobro de servicios policiales que no se cumplían en distintas áreas de la fuerza.
Según el informe del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, los jefes policiales cumplían funciones en la División de Operaciones Urbanas de Contención de Actividades Deportivas (DOUCAD) y en el cuerpo de Prevención Barrial encargada de patrullar los barrios de emergencia.
Según la sospecha de las autoridades del Ministerio, los involucrados, cuyas identidades no fueron difundidas, hacían figurar a mas personas de las que realmente iban a cumplir la tarea por lo que, de esta forma, se pagaban servicios que no se brindaban.
El comunicado oficial destaca que "en virtud de la línea investigativa por el proceso interno abierto, entre la noche de ayer y la mañana de hoy se realizaron diferentes inspecciones en reparticiones de la Policía para constatar el presentismo del personal, a fin de determinar la posible existencia de un ilícito".
