Romina Candia Flores, de 32 años, murió luego de realizarse una liposucción en la Clínica Matienzo de Belgrano, en la Ciudad de Buenos Aires.
"Romina no merecía morir de la manera que murió. Era una mujer joven y sana", dijo Jessica, hermana de la víctima. Su familia exige Justicia y comenzó una campaña en las redes #JusticiaPorRomi. El médico que la operó, Armando Donati, el anestesiólogo y el director del centro médico fueron imputados por homicidio culposo.
"Ella no salió bien de la primera operación. Estaba anémica por la pérdida de sangre que tuvo. El médico le hizo una nueva cirugía al día siguiente y ahí quedó inconsciente", narró Jessica a TN. Luego, Donati les decía que su hermana estaba lúcida pero no pudieron verla hasta que la llevaron al Sanatorio Güemes.
"Cuando la sacaron para llevarla a la ambulancia tenía un respirador, porque no respiraba por sí sola. Estaba hinchada y morada", rememoró la mujer. Además, recalcó que la ambulancia no era de alta complejidad como precisaba el cuadro de la paciente y puso en duda el accionar del cirujano: "No entiendo por qué desde un primer momento no pidió el traslado si él no estaba en condiciones de tratarla".
La familia de Romina denuncia que la Clínica Matienzo no posee el quirófano habilitado para este tipo de operación, una dermolipectomía y lipoescultura.
"El médico de la ambulancia nos dijo que mi hermana estaba muy mal, que iban a hacer lo posible posible por salvarla pero que no sabía si lo iba a lograr", aclaró.
Romina tenía tres hijos. Pagó $50 mil la operación. Hizo absolutamente de todo para conseguir ese dinero. Había perdido 8 kilos para someterse a la cirugía.
Llegó al Sanatorio Güemes totalmente complicada. Allí, la indujeron a un coma farmacológico para poder estabilizarla. Peleó 22 días por su vida. "Nos dijeron que nos preparemos para lo peor", expresó Jessica, que también recordó: "Ella decía que se iba a ir".
Romina perdió la vida en diciembre. Pero recién en marzo, la familia pudo hacer la denuncia formal. El fiscal Ignacio Mahiques acusó al médico, al anestesiólogo y al director de la Clínica Matienzo de homicidio culposo. "Reclamamos Justicia. Si hubo responsables de la muerte de mi hermana, queremos que pague. Ella no merecía morir de la manera que murió. Era una mujer joven y sana", sentenció Jessica.