La Justicia resolvió este lunes detener al gasista que había inspeccionado la escuela primaria N° 49 de Moreno bajo el cargo de homicidio culposo agravado.
Se trata de Chistian Ricobene, quien había revisado las instalaciones del colegio un día antes del escape de gas que provocó la explosión de una estufa. Por el estallido murieron la vicedirectora de la institución, Sandra Calamano, y el auxiliar docente Rubén Rodríguez.
El día siguiente a la tragedia, el gasista declaró en la causa que encabeza la fiscal Gabriela Urrutia y dijo que estuvo en la escuela y advirtió que "había una conexión irregular, porque la cañería tenía instalada una pieza "T". Uno de los extremos iba a la estufa y el otro al anafe. Por esa razón inhabilité el anafe".
Además, Ricobene aseguró que fue contratado por el Consejo escolar de Moreno (intervenido en octubre del año pasado por graves irregularidades), y recordó que el día anterior dejaron en claro que el aparato no debía utilizarse y que estaba en observación.
Según consta en el Código Penal, en caso de ser condenado puede recibir una pena de hasta 5 años de prisión e inhabilitación especial de entre 5 y 10 años.