A raíz de la muerte de dos mujeres policías en menos de 48 horas en la Provincia de Buenos Aires -una falleció y la otra fue declarada con muerte cerebral-, Francisco Pont Vergés, secretario de Política Criminal de la Procuración bonaerense, hizo referencia al flagelo de la inseguridad.
"El delito tiene esas cosas de rachas, estacional, de golpe se juntan varios hechos de la misma característica que impactan mucho en la sociedad. Es un fenómeno mundial, pasa en todos lados", expresó.
"Este fenómeno concreto podría ser propio nuestro o de otros países que están en situaciones similares a la nuestra. Es un fenómeno multicausal: es la avidez por las armas, también por demostrar que se puede atacar a un policía impunemente, producto de la droga”, añadió Pont Vergés.
Con respecto al caso de Lourdes Espíndola, quien recibió un balazo en el cuello luego de que dos ladrones intentaran robarle el arma reglamentaria, el funcionario de la Provincia dijo que es dificultoso realizar una reconstrucción del hecho, debido a que las cámaras de la Autopista del Oeste "no funcionan", que en el lugar "no existen cámaras particulares" y que el domo del municipio "justo estaba apuntando para el otro lado".
Además, advirtió que el hecho de que los policías estén armados cuando no están en servicio "es un reaseguro pero también un riesgo".
El otro caso que tomó repercusión este fin de semana fue el de una mujer policía que se encontraba junto a su novio en su vivienda de Glew, quien fue asesinada por un delincuente que había ingresado a robar. Tamara Ramírez, de 26 años, recibió un disparo en la sien y su novio Mariano Albornoz (24), también oficial de la Policía Local de Almirante Brown, fue baleado en una de sus piernas.