Con extremas medidas de seguridad, ayer por la mañana sonó el cañonazo de largada del maratón más famoso del mundo, que se realizó tras el terror que causó el atentado del martes pasado que mató a 5 rosarinos que paseaban en bicicleta por el sur de Manhattan.
En el maratón de Nueva York - uno de los acontecimientos más populares del planeta- participaron unos 300 argentinos que corrieron con una cinta en señal de luto y la camiseta celeste y blanca. La carrera contó con más de 50.000 corredores y unas 2,5 millones de personas se acercaron a alentar por las calles a los maratonistas, que recorrieron 42 kilómetros por los 5 condados neoyorquinos.
Los maratonistas argentinos decidieron rendir homenaje a sus compatriotas en esta carrera. "La mayoría de ellos estuvieron con la camiseta argentina y una cintita negra enganchada en el número del corredor en señal de luto por lo acontecido", dijo a Clarín Daniel Soprano, gerente de la empresa Amaison, que llevó a 170 de los casi 300 argentinos que compitieron, y él mismo fue un participante.
La seguridad del maratón se incrementó con camiones de arena estacionados en el área para evitar ataques con vehículos, mayor número de policías en los techos y más unidades contra francotiradores, entre otras medidas. Además de los oficiales uniformados a lo largo de la ruta, agentes vestidos de civil se mezclaron con los espectadores para detectar cualquier actividad sospechosa.
Fabiana Reyes es de un grupo de running de Vicente López y fue a Nueva York con unas amigas a correr el maratón. “La gente nos para por la calle, nos ven con la campera de Argentina puesta y nos ofrecen condolencias por lo que pasó”, contó a Clarín. Mientras que Alberto Godoy es de Buenos Aires y cuenta que el atentado le pegó de cerca porque justo el día anterior había estado corriendo por la zona y un amigo conocía a uno de los fallecidos.
El alerta y las extremas medidas de seguridad en la carrera de ayer no sólo fue por el atentado del martes: en 2013, la tradicional maratón de Boston había sufrido un ataque con bomba que dejó 3 muertos y más de 200 heridos en la línea de meta.
Los homenajes a las víctimas argentinas continuarán hoy cuando arribe el presidente Mauricio Macri a Manhattan. Visitará a uno de los sobrevivientes del atentado, Matías Marro, que está internado en el hospital Presbyterian, con fracturas y contusiones.
Cerca del mediodía está previsto que el presidente se traslade al lugar del atentado, en la bicisenda a la vera del río Hudson, y allí se concretará una breve ceremonia. En las últimas horas, los amigos y las familias de los fallecidos que sobrevivieron colocaron flores, velas y cruces blancas en nombre de las víctimas.