La justicia obligó a un colegio privado de La Plata a suspender el aumento en las cuotas de este año y volver a los montos que tenían en noviembre de 2016, ya que las subas habían sido decididas sin avisar antes a los padres.
La medida cautelar se dictó luego de que padres de alumnos de la Nueva Escuela Argentina (NEA), un establecimiento de enseñanza privada que no cuenta con subsidio estatal, denunciaron que no habían sido consultados sobre el reajuste de aranceles, tal como indica la legislación vigente.
En diálogo con Télam, el titular del Juzgado Municipal de Faltas Nº 2 de La Plata, Dante Rusconi, explicó que "el colegio debe poner a consideración de todos los padres los valores y recabar la conformidad o no respecto al precio de la cuota y luego elevar ese arancel para que la suba sea autorizada por la autoridad de aplicación". Y agregó que "como este colegio no cumplió esos pasos y dictó el aumento unilateralmente, dictamos la medida cautelar que ordena retrotraer los valores arancelarios de noviembre".
De todos modos, Rusconi subrayó que "aún no sabemos si el colegio impugnará la resolución judicialmente o si la van a cumplir, pero lo cierto es que todos los colegios privados que no reciben subvención estatal deberían cumplir con este requisito".
Rusconi detalló que "desde lo jurídico los usuarios de los servicios de educación privada están protegidos por la Ley de Defensa del Consumidor, por el artículo 42 de la Constitución nacional y por los principios que se aplican a la materia" y contó que "hay normativa específica que regula el servicio de educación privada que establece un mecanismo puntual para que los colegios establezcan los aranceles".
"Aplicamos la sanción que prevé la normativa específica cuando las escuelas no cumplen con ese requisito", apuntó y contó que "además, como el decreto reglamentario que establece cómo se fijan los aranceles, determina una fecha límite, noviembre de cada año, ya en 2017 no deberían poder aplicar el aumento".
