Sin respetar ningún protocolo, se realizó una fiesta clandestina con más de 560 personas en la localidad de Sauce de Portezuelo, cerca de Punta del Este. La reunión se realizaba en la casa de un ciudadano argentino.
A las 4.30 de la mañana los agentes llegaron al predio junto a personal de Gestión Ambiental de la Intendencia de Montevideo, tras haber recibido los primeros indicios por Instagram. En el lugar, había una gran cantidad de botellas en el piso y en mesas de plástico. La fiscalía ordenó incautar los equipos de música.
“Había más de 500 personas, cero protección, una falta total de responsabilidad por lo que está viviendo el país” por la pandemia de coronavirus, confesó a “TN” el coordinador de la Dirección General de Higiene y Medio Ambiente de la Intendencia de Maldonado, Carlos Medina.
“La intendencia por su parte ahora va a aplicar sanciones, a la espera de que la Justicia resuelve el caso”, agregó. El ciudadano argentino “se presentó como propietario y firmó como propietario, pero no sabemos si es un residente que está todo el año”, explicó Medina.
Desde el inicio de la pandemia, las autoridades desarticularon unas 30 fiestas clandestinas en la zona, precisó Medina. “En general se organizan a través de las redes y a veces se pagan entradas por medios electrónicos”, sostuvo el funcionario.
Para frenar los contagios, el Parlamento uruguayo aprobó el jueves extender el límite al derecho de reunión por 120 días más.
Este viernes, se detectaron 1616 nuevos casos de coronavirus en Uruguay. En total, hubo 760 personas y 78.401contagios y unas 164 personas se encuentran actualmente en cuidados intensivos, según las cifras oficiales.
Uruguay recibió hasta el momento 1.750.000 dosis de la vacuna del laboratorio chino Sinovac. Los grupos prioritarios fueron docentes, policías, bomberos, militares y trabajadores del Instituto del Niño y el Adolescente (INAU) menores de 60 años.
