El ingenio para el delito no tiene límites. Esta vez fueron dos estudiantes chinos de ingeniería en la ciudad estadounidense de Oregón. Los jóvenes estafaron a Apple con miles de dólares y ahora enfrentan cargos criminales en una corta federal, según informó el sitio The Oregonian
Se trata de Yangyang Zhou y Quan Jiang, dos estudiantes chinos que fueron acusados de transportar miles de iPhones falsificados desde Hong Kong a Estados Unidos para generar un comercio ilegal.
La engañosa actividad comenzó en 2017 cuando los jóvenes empezaron a enviar los teléfonos al servicio técnico de Apple manifestando que los celulares no encendían. Comprometida, la empresa reemplazó muchos de esos teléfonos falsos por originales, que tuvo un costo estimado de 899.800 dólares.
El siguiente paso fue vender los teléfonos en el exterior. Zhou y Jiang obtuvieron enormes ganancias de las ventas, según informaron fuentes judiciales. En total, 1439 reclamos tuvieron reemplazo de los 3069 que realizaron los estudiantes chinos.
El destape del negocio ilegal se dio luego de que unos oficiales de aduanas identificaran a cinco sospechosos con varios aparatos con el logo de Apple de dudosa procedencia. Los estudiantes confesaron que son intermediarios de una banda delictiva radicada en China.
Un agente manifestó que el engaño se pudo dar gracias a que los empleados de Apple no podían verificar la autenticidad de los dispositivos porque no se encendían. El reemplazo se dio porque los hombres manifestaron que estaban cubiertos por la garantía del producto.
Lo extraño es que los empleados de Apple nunca solicitaron ningún comprobante para poder acreditar esto.