Corea del Norte enseñó hoy al mundo su arsenal de misiles en un gran desfile militar con el que celebró su mayor fiesta nacional y lanzó el mensaje a Estados Unidos de que el país está preparado para la guerra en caso de agresión.
Con la presencia del líder, Kim Jong-un, el régimen de Pyongyang hizo una monumental exhibición de armamento en el 105 aniversario del fundador del país Kim Il-sung y en un momento de preocupación internacional por la elevada tensión en la región.
Aunque el líder de 33 años no tomó la palabra, el considerado número dos del régimen, Choe Ryong-hae, se encargó de mandar un mensaje claro y contundente al presidente estadounidense, Donald Trump.
"Estamos completamente preparados para afrontar cualquier tipo de guerra con nuestras armas nucleares si EEUU ataca la península de Corea", dijo en su discurso el vicepresidente del Partido de los Trabajadores.