La utilización de la capacidad instalada en la industria se ubicó en el 56,2% en enero de 2019, nivel inferior al registrado en el mismo mes de 2018 cuando se posicionó en el 61,6%, un guarismo que ya era muy bajo.
Así lo reveló este martes del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) al dar a conocer su informe mensual sobre la utilización de la capacidad instalada en la industria correspondiente a enero.
El dato se torna preocupante si se considera que es el nivel más bajo desde julio de 2002, cuando la Argentina intentaba salir de una de sus peores crisis económicas, financieras y políticas de la historia.
El más golpeado es el sector de las automotrices, que en enero operó apenas al 15,7% de su capacidad instalada. Se trató casi de una parálisis total.
Si bien las automotrices suelen aprovechar las vacaciones de sus empleados en enero para hacer paradas técnicas, el dato se ubicó casi diez puntos porcentuales por debajo del mismo mes del año pasado cuando el uso de la capacidad instalada fue del 25,6%.
“El dato de enero es consecuencia de la disminución de la cantidad de unidades fabricadas por las terminales automotrices a partir de la menor demanda y de la realización de paradas técnicas en algunas plantas productivas”, explicó el Indec.
El bloque de productos textiles presentó un nivel de utilización de la capacidad instalada de 31,4%, inferior al registrado en el mismo mes de 2018 (57,2%). El menor nivel de utilización del bloque se explica por la menor elaboración de hilados de algodón y de tejidos.
En los bloques sectoriales que se ubican por debajo del nivel general de la industria son también productos de caucho y plástico (48,4%) y la industria metalmecánica excepto automotores (38,4%).
Los bloques sectoriales que presentaron en enero de 2019 niveles de utilización de la capacidad instalada superiores al nivel general son: productos del tabaco (83,9%), refinación del petróleo (76,6%), industrias metálicas básicas (71,7%), sustancias y productos químicos (68,9%), papel y cartón (67,4%), productos alimenticios y bebidas (57,5%), productos minerales no metálicos (57,1%) y edición e impresión (56,7%).
