Una polémica y controvertida iniciativa de la ONG Save Haven Baby Boxes está siendo llevada a cabo en Estados Unidos, país donde se instalaron buzones para abandonar a bebés no deseados.
Se trata de los "Baby Boxes", los cuales cuentan con reguladores de temperatura y un sensor que avisa a los servicios de emergencia cuando se deposita un pequeño en el interior.
Si bien en tierras estadounidenses es ilegal abandonar bebés, existe la ley "save haven" (refugio seguro) que permite su abandono si el recién nacido es entregado en un lugar seguro o en mano.
Al respecto Priscilla Pruitt, portavoz de la ONG que impulsó esta campaña, aseguró que el abandono de bebés es un "problema" en el país consecuencia de los embarazos no deseados en adolescentes, y que esta idea es "el último recurso" para evitarlo. El último buzón fue instalado en diciembre, dentro del cuartel de bomberos del estado de Indiana.
Detrás de esta organización está Mónica Kelsey, una mujer que fue abandonada cuando era recién nacida,. quien precisó que con la iniciativa se pretende "salvar vidas" y que las mujeres no aborten.
Cabe destacar que, desde 2004 hasta la acualidad, 131 bebés ya fueron rescatados con este método. Sin embargo, el gobernador de Michigan, Rick Snyder, prohibió la instalación al considerar que el hecho de "permitir que los padres puedan renunciar a su bebé simplemente depositándolo en un lugar, en vez de entregarlo a un oficial de la policía, bomberos o a empleados de hospitales" es una conducta inapropiada.