Felipe Solá cree que este es su momento. No sólo se siente preparado para ser presidente sino que está convencido de que es la figura que encaja en esa mentada y quimérica candidatura de consenso entre el kirchnerismo y el peronismo.
El diputado nacional y exgobernador bonaerense considera que Cristina Kirchner no debe demorar más allá de febrero o marzo una definición sobre su postulación. Y entiende que, en caso de no competir, tendría que incorporar Unidad Ciudadana de inmediato al PJ.
En una entrevista que le concedió en su despacho a La Voz/Los Andes, Solá, que hace tres meses abandonó a Sergio Massa para formar un espacio propio más cerca de Cristina, también desalentó la posibilidad de que Roberto Lavagna sea el postulante del peronismo unido y le dedicó un párrafo al kirchnerismo: "Tiene más fanáticos que Cambiemos. Eso es el 'Vamos a volver'. Si no comprendemos que esa identidad llevada a su extremo provoca rechazos, entonces no vamos por el triunfo", advirtió.
--¿Qué país dejará Macri?
--La deuda externa es grave: hay un orden de vencimientos que hace que 2019 sea difícil pero 2020, más difícil todavía. La programación de los vencimientos es pésima, contra lo que ellos dicen, y las posibilidades de pagar intereses solamente, pensando en que nos van a refinanciar el capital, son nulas; salvo que imaginemos una Argentina todavía más empobrecida y una situación económica y social finalmente desquiciada. Los más perjudicados de estos años son los pobres, la industria y vastos sectores de la clase media, por la caída de la económica, la carga impositiva y la carga tarifaria y la ausencia total de crédito. Vamos a terminar con un PBI per cápita entre seis y siete puntos menor que el de 2015, un salario real que en el mejor de los casos estará 20 puntos abajo y una desocupación que orillará el 12% el año que viene.
--¿Es un país ingobernable?
--No, la Argentina tiene una capacidad de reacción muy fuerte, aun en este mundo complejo, y tiene una energía como la que nos hizo salir de 2002. No digo que sea fácil, pero los pueblos no quiebran.
--¿A qué atribuye que Macri diga "Es por acá"?
--Supongo que ha llegado a un punto en el que no tiene otra salida que morir con la de él, y seguir anunciando que en algún momento va a ocurrir un milagro y van a desembarcar Colón y los inversores.
--Es como una teoría del derrame.
--No, porque para haber derrame tiene que subir algo y derramar. ¿Y qué es lo que está subiendo acá? La deuda, el dólar, la desocupación, la inflación. Vamos a terminar con una inflación que superará el 23% que ellos pronostican, por el arrastre de este año. Decía que era lo más fácil bajar la inflación y terminará su gestión con un 227% acumulado. No supo parar la inflación y mató a la economía. ¿Qué va a decir? Que es por acá, claro.
--¿Qué salida propone usted?
--La diferencia fundamental es que el primer objetivo del nuevo gobierno, el que no puede violar bajo ningún punto de vista, la prioridad, el filtro por el que deben pasar todas las políticas, es la defensa del trabajo argentino. Si no cumplen ese requisito, no sirve. Yo me siento totalmente en condiciones y somos mucho más capaces los peronistas que Macri de hacer crecer el PBI, hacer caer la inflación y revitalizar el mercado interno y el sinnúmero de pymes y empresas que están en problemas. Somos mucho más capaces de hacer acuerdos salariales con los gremios. ¿Quiénes están más capacitados: Macri o nosotros? Esa es la pregunta del balotaje.
--Usted reclama la unidad del peronismo con Cristina adentro. Pero Miguel Pichetto, Juan Manuel Urtubey y Massa se rehúsan. ¿Es posible ganarle a Macri con el peronismo dividido?
--Hay que averiguar de quién son los votos de ese peronismo dividido, a quién votarían sin el peronismo dividido... El kirchnerismo debe tomar plena conciencia de eso, de que tiene que trasvasar sus bordes o lo que ellos imaginan que son sus fronteras. Y eso es un desafío enorme que puede implicar un cambio muy importante en el discurso y rechazar absolutamente cualquier restauración.
--¿Eso qué significa?
--Los que repiten "Vamos a volver". Eso no nos sirve absolutamente para nada. Es un pogo perdedor. Nosotros vamos al futuro. Vamos a cambiar para que tenga futuro la Argentina, ese es el tema. No vamos a restaurar, no venimos a vengarnos. Con solo levantar un poco la situación podemos empezar a imaginarnos otras cosas. Pero lo primero es eso, no venimos a dar una batalla cultura, venimos a cambiar las cosas. La cultura después cambia sola.
--Si Cristina no fuera candidata, ¿se imagina una Paso entre Unidad Ciudadana y Alternativa Argentina, es decir de todo el peronismo?
--No es descartable, para nada. O hay acuerdo, lo que significa que no haya Paso o que haya una Paso acotada.
--¿Usted es partidario de un candidato de consenso?
--Estamos en enero, ocho personas en una Paso no es un proyecto sólido.
--¿Es posible acordar un programa común con estas dos facciones grandes del peronismo?
--¿Quién dijo que la facción de Pichetto es grande?
--Un acuerdo entre el kirchnerismo y el peronismo en que se referencian los gobernadores, ¿es posible?
--El macrismo tiene sus fanáticos y el kirchnerismo tiene aún más fanáticos, una fidelidad absoluta, por llamarlo de otra manera. Si no comprendemos que esa identidad llevada a su extremo, y eso es lo que expresa el Vamos a volver, provoca rechazos, entonces no vamos por el triunfo. Hay que tener una comprensión de que vamos por el trabajo argentino, y que las metas de hoy no pueden ser las de antes, porque hoy está mucho peor el país. Son metas fuertes pero modestas. Para eso necesitamos unidad, y la mayor unidad posible.
--En esta última semana Lavagna anduvo sacándose fotos. ¿Puede ser el candidato de consenso?
--Roberto Lavagna fue un hombre importantísimo en la Argentina durante los tres años en que estuvo en la función pública, para mí es el mejor economista político que tenemos; ya quisiera yo, si fuera presidente, tenerlo cerca. Pero no es un hombre que vaya a mover multitudes. Tiene muy buena imagen, pero no parece un tipo dispuesto a moverse y generar la unidad, que es necesaria. Tiene una actitud mucho más pasiva. En 2007 fue candidato, mostró su voluntad. Es un hombre de consulta, no de vez en cuando sino seguida, tengo aprecio por él pero políticamente no lo veo preparado para hacer la unidad.
--¿Y usted? ¿Este es su momento?
--Yo vi mi momento muchas veces y me preparé. Ahora, todavía la incertidumbre es grande, pero por lo menos tengo seguridad: estoy preparado para competir y ser presidente. Por supuesto, soy una parte de algo que no está para nada definido todavía y creo que lo importante es ganar y poder gobernar.
--¿Le gusta la gestión de Patricia Bullrich?
--(Muestra una tapa del diario Clarín que tiene de título central "Crecieron los robos en la ciudad y hubo 30 ataques de motochorros por día"). ¡Pero si es un éxito! Yo sé del tema, no porque sea un experto sino porque goberné la Provincia de Buenos Aires. Entre 2004 y 2007 bajamos el delito en la provincia de manera formidable. Poner cara de mala, decir que cada uno puede tener un arma si quiere, empoderar militarmente a cuerpos de seguridad que no son militares sino civiles armados y supuestamente preparados para defender a los desarmados, mientras se empobrece a la gente, mientras no hay ninguna salida para la juventud y la política antidrogras es pésima desde el punto de vista de las adicciones, produce mucho más delito. Patricia Bullrich nos muestra que encuentra marihuana y parece que la tenemos que aplaudir. No creo en estas políticas sino en las que aplicamos nosotros en la provincia.
--¿Qué dimensión tiene Schiaretti en el peronismo nacional?
--Hay una parte de Schiaretti que yo respeto mucho, que es su capacidad personal, que yo he conocido hace 25 años, cuando él era secretario de Industria y yo, de Agricultura. Buena parte de la población cordobesa también aprecia su capacidad personal. Tiene muchas chances de volver a ser gobernador. No puedo opinar sobre su gobierno, pero sí pensar, a la luz de lo que conozco de él, que ha sido un buen gobernador. Y en una provincia con una tendencia a votar eficiencia y que se siente distinta del resto, porque es bastante distinta.
FRASES
"Los peronistas estamos mucho más capacitados para hacer crecer a la Argentina que este gobierno"
"Lavagna no es un hombre que vaya a mover multitudes. Tiene muy buena imagen, pero no parece un tipo dispuesto a moverse y generar la unidad, que es necesaria".
"El kirchnerismo tiene aún más fanáticos, una fidelidad absoluta, por llamarlo de otra manera. Es tan fuerte esa identidad que genera rechazo. Si no comprendemos que esa identidad llevada a su extremo, y eso es lo que expresa el Vamos a volver, provoca rechazos, entonces no vamos por el triunfo".
"Estoy preparado para competir y ser presidente. Por supuesto, soy una parte de algo que no está para nada definido todavía y creo que lo importante es ganar y poder gobernar, las dos cosas".
"Patricia Bullrich nos muestra que encuentra marihuana y parece que la tenemos que aplaudir".