Valentín, de 10 años, decidió hacerse hincha de River, pese a que su papá, Maximiliano Pérez, lo crió con los colores de San Lorenzo y lo hizo simpatizante del equipo de Boedo. Pero el sentimiento ganó.
Es que una vez consumada la victoria de River ante Boca por la final de la Copa Libertadores, Valentín salió con su madre a comprar unas facturas para tomar la merienda y se encontró con un grupo de hinchas de River festejando el título.
Esa imagen dejó maravillado al pequeño, a tal punto que en el auto, ya de regreso a su casa, escribió una carta dedicada a su papá. Al no animarse a entregársela en persona, le pidió a su mamá que lo haga.
"Papá: ya tengo muy claro que San Lorenzo es un equipo genial y que es uno de los mejores club para mí, pero al ir a la caravana, me dí cuenta que River es un sentimiento que no voy a poder olvidar. Pero me decidí y quiero ser de River porque siempre me re-gustó. Te respeto a vos y a tu club", escribió Valentín.