Miles de manifestantes del movimiento llamado "chalecos amarillos" se enfrentaron con la policía parisina por el incremento de los combustibles y la pérdida del poder adquisitivo en Francia. Los incidentes se desarrollaron este sábado en el centro de París, luego de varios días de protestas en el resto del país.
Los manifestantes marcharon por la emblemática avenida Campos Elíseos de la capital y las fuerzas de seguridad usaron gases lacrimógenos y un camión hidrante para alejarlos a las personas que intentaban forzar un cordón policial, según constató una periodista de la AFP.
El ministro francés del Interior, Christophe Castaner, denunció estos distubios en los Campos Elíseos, y acusó a "sediciosos" de la "ultraderecha", que "respondieron al llamado de Marine Le Pen", líder del partido de extrema derecha Agrupación Nacional, para movilizarse en Paris.
El movimiento plantea un verdadero desafío para Macron que no parece dispuesto a disminuír el alza del precio de los combustibles, asegurando que se trata de "reducir la transición ecológica".