Donald Trump pudo sortear una elección complicada para su mandato y el resultado en favor de los demócratas no fue tan rotundo como se esperaba: si bien el oficialismo estadounidense perdió el control de la Cámara de Representantes, pero mantuvo la mayoría en el Senado para la segunda mitad de su mandato.
Trump había dicho en repetidas oportunidades que estas elecciones un referéndum para su gestión. Es por eso que se puso al frente de la campaña y apoyando a los candidatos republicanos en estados clave.
La Cámara baja podría transformarse en un freno para Trump, porque al no tener mayoría en Diputados, el presidente republicano tendrá que negociar para que se aprueben reformas impositivas, de salud o migración.
A partir del resultado de las elecciones, el foco estará puesto en el 2020, donde el mandatario definirá si busca la reelección contra un candidato demócrata que por el momento no aparece.