La economía argentina está a punto de ingresar en un momento de cambio. Desde este lunes, el dólar, los precios, los salarios, la tasa de interés, el comercio exterior y muchas otras variables se moverán dentro de otro esquema. Ese nuevo marco tiene como eje cuatro definiciones que se dieron a partir del acuerdo con el Fondo Monetario internacional, explicó Clarín.
El primero: el ministro de Economía, Nicolás Dujovne, cuenta con el respaldo para pagar las deudas este año y el que viene. Ese dato (traducido en dinero: los 57.100 millones de dólares del FMI) provocó la suba de los bonos argentinos valuados en dólares, ya que quedó despejado el temor a un default durante la presidencia de Mauricio Macri.
Otro de los ejes es que, a partir de ahora, el Banco Central no venderá dólares en el mercado contado si la divisa oscila entre un "piso" de $34 y un "techo" de $44. Esa banda, a su vez y para evitar que el dólar se atrase, subirá 3% por mes.
Pero que el Central no venda dólares no implica que no lo vaya a hacer el Gobierno. Como anticipó Dujovne, el Tesoro usará los dólares que le concedió Christine Lagarde para financiar el déficit. Por lo tanto, le dirá al Banco Nación que venda esas divisas para conseguir los pesos y destinarlos al pago de salarios, jubilaciones u obras públicas.