Con disturbios e incidentes, los festejos en París pasaron de la alegría por la segunda Copa del Mundo ganada por Francia a enfrentamientos entre hinchas y la policía en Champs Elysees, los cuales terminaron con al menos un muerto y cuatro heridos.
En la capital de Francia fue donde más fanáticos se reunieron para ver y vivir la esperada final contra Croacia. Con camisetas, banderas y todo el color, los simpatizantes coparon el Arco del Triunfo y se quedaron alentando hasta largas horas de la tarde. Sin embargo, el alcohol y la euforia de los aficionados fueron determinantes para los desmanes en las calles parisinas.
En la zona hubo cerca de 12 mil policías, que reprimieron a los manifestantes con gases lacrimógenos para dispersarlos.
Si bien el operativo fue llevado adelante por temor a ataques terroristas, la Prefectura de Policía de París había decidido cerrar la Torre Eiffel y montar un operativo antiterrorista.