Desde hace algunas semanas, la economía Argentina está en boca de todos. Carlos Mazoni para La Nación explica que los principales motivos son: déficit fiscal alto, mercado de capitales chico y elevada exposición al endeudamiento.
Los países de la región, en promedio, devaluaron su moneda 10%; mientras que Argentina devaluó 15% desde el 25 de abril pasado. A diferencia de ellos, viene depreciando el peso 35% desde julio de 2017 y 47% desde mayo del año pasado, según Ariel Coremberg, director del Centro de Estudios de la Productividad de la Universidad de Buenos Aires.
Ninguno de los países vecinos tuvo que a pedirle prestado al Fondo Monetario Internacional (FMI), ante una fuga de dólares y una repentina crisis de confianza de los inversores internacionales. ¿Por qué sucede esto? Porque tienen un alto nivel de reservas, señales de orden fiscal importantes y un gran mercado de capitales. Brasil, por ejemplo, tiene muchísima liquidez y 20 años de metas de inflación con una suba generalizada de precios de menos de 5% anual.
Marcelo Elizondo, director de la consultora DNI, dice que Argentina declaró 8 veces el default de su deuda pública en los últimos 60 años y es ese el motivo que explicaría donde estamos parados hoy.