Los cigarrillos electrónicos Juul se han popularizado entre los adolescentes, cuando en realidad fueron creados para aquellos adultos que buscan dejar de fumar.
En Estados Unidos, no sólo los padres luchan contra esta moda en menores de edad, sino también los directores de las escuelas y la policía. Por ejemplo, el sistema escolar del distrito Upper Dublin en el este de Pensilvania prohibió las unidades de memoria USB porque los alumnos cargaban sus Juuls con las computadoras que les daban.
"El tamaño de estas cosas hace posible que los estudiantes que son expertos en usarlas puedan ocultarlas fácilmente", reconoció Bob Mosier, vocero de las escuelas del condado de Anne Arundel en Maryland a The Washington Post.
El aparato funcionan con una pila. Cuando la cápsula que contiene se calienta, produce un vapor. El producto también ofrece una gran variedad de sabores. Lo cierto es que, ante esta situación, la compañía lanzó un comunicado en el que acláró: "Ningún usuario joven o no adicto a la nicotina debe probarlo".