Este domingo, Boca logró una victoria clave en busca de su coronación en la Superliga. Se impuso 2-1 ante Talleres en los últimos minutos del partido. Pablo Pérez convirtió el tanto del triunfo y se lo festejo, con insultos incluidos, a los hinchas xeneizes.
El mismo volante admitió que no tuvo un buen partido por eso decidió descargarse y realizar grito desaforado cuando marcó el 2-1 final.
"Me saqué muchísima bronca, hoy fue uno de los partidos que jugué. Me sentía muy impreciso y cansado", explicó Pérez.