Un avión de United Airlines que había partido desde Chicago hacia Hong Kong se vio obligado a aterrizar en Alaska por un "pasajero perturbador" que había descompuesto dos inodoros.
Según informó la propia aerolínea, el vuelo UA895 tuvo que hacer un descenso no programado después de que dos de los inodoros quedaran tapados con excrementos. Además señaló que había "manchas de las heces de un pasajero por todas partes".
El incidente ocurrió el jueves a la noche, cuando un ciudadano de origen vietnamita con residencia estadounidense pidió ayuda a las azafatas y la tripulación decidió aterrizar en la ciudad de Anchorage, en Alaska.
"Recibimos un reporte de un pasajero que había dañado los inodoros con sus propias heces", dijo el vocero de la policía del aeropuerto de Anchorage, Joe Gamache, e indicó que el hombre no representaba ninguna amenaza.
También contó que el pasajero tiene 22 años y que en todo momento se mostró colaborador con las autoridades. Aunque no enfrenta "ningún cargo criminal", la policía lo esposó y lo escoltó al salir del avión.
Según informó el canal de televisión local KTUU, el pasajero fue trasladado al hospital para que se le realizara un estudio de salud mental después de ser entrevistado con la ayuda de un traductor.
En el vuelo viajaban 245 personas, y se les ofreció hospedaje a todos los pasajeros afectados.