La Cancillería argentina afirmó que "no ha cambiado su posición respecto a Venezuela", después de que las palabras de Carlos Raimundi, representante argentino ante la Organización de Estados Americanos (OEA), que sembraron dudas al respecto en otras delegaciones de países miembros.
"La posición argentina con respecto a la situación en Venezuela es seguir apoyando la necesidad de que se restablezcan plenamente las instituciones democráticas", indicó el responsable de Relaciones Exteriores de la Cancillería argentina, Pablo Tettamanti, en un comunicado.
En dicho escrito, la Cancillería argentina expresa que "el Gobierno de Venezuela tiene responsabilidad en el pleno respeto a los derechos humanos e incluso en hacer todo lo que está a su alcance para hacer que no sean violados ni por la acción propia ni por la acción de otros".
Según TN, fuentes oficiales del Gobierno criticaron los dichos ce Raimundi. "No debía hablar sobre el informe de la ONU, no le corresponde. Se tomó atribuciones que no debía, no cayó nada bien".
"Hemos manifestado -al igual que el Grupo de contacto del que formamos parte hace pocos días- nuestra gran preocupación por las graves violaciones de los DDHH que se reportan tanto en el informe de la Alta Comisionada como en el de los expertos independientes", recaló Tettamanti, miembro de la Cancillería que dirige Felipe Solá.
Asimismo, aseveró que trabajan para "fomentar en Venezuela elecciones libres, justas y creíbles".
La Misión Internacional para analizar posibles violaciones de derechos humanos en Venezuela denunció la semana pasada ante Naciones Unidas crímenes contra la humanidad cometidos por parte del Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien a su vez acusó a los investigadores de obedecer los dictados de EEUU y el Grupo de Lima.
"La Argentina está trabajando activamente en el seguimiento de toda la agenda incluyendo las resoluciones que tienen que ver con estos informes, elevados uno por la Alta Comisionada y el otro por los expertos independientes”, añadió Tettamanti.