Al aire del Cantando 2020, la jurado Moria Casán dio la nota, se enfrentó con la coconductora Laurita Fernández y hasta amenazó con renunciar al certamen. "Si me quedo, después lo hago venir a mi abogado porque esto no es lo que arreglé", reclamó la One, que aseguró que ella firmó contrato para tener libertad, y no la dejan hablar ni interrumpir.
"Soy la bastonera, puedo interrumpir. A propósito de interrumpir y de meterme, quiero decir que la señorita coconductora hoy es un pulpo, quiero que hables más vos", le dijo a Ángel de Brito, ofuscada con Laurita. "Si me dan más tiempo ustedes, yo hablo más", respondió Ángel.
Y entonces Fernández intervino: "A mí me gustaría que des la devolución, Moria", dijo. "Ah, no me digas", le contestó la diva. "Vos estás para coconducir, mi amor. Y yo para dar la devolución cuando se me cante", agregó.
Más tarde en el programa, Moria abandonó su silla de jurado y se quedó de pie en otro sitio. Cuando le preguntaron por la decisión, explicó: "Quiero aclarar una cosa. Quieren que sea rápida. Firmé acá no para ser jurado. Fui jurado 10 años y no voy a calentar el culo en una silla".
"Yo podía frenar a quien quiera, incluso a ustedes", dijo sobre las condiciones del contrato que firmó para participar del show. "Eso me prometieron. Moria tiene el plano libre. Para mí el plano libre no es ser jurado. Puedo dar devoluciones y a la coconductora le puedo decir 'pulpito'. Porque eso es lo que yo arreglé. Si no se me respeta, me voy. No me interesa poner el culo ahí y me estén corriendo. No es así la vida", agregó.